Columna de Paula Walker: Los acuerdos

Lobby corrupción


Estamos a la espera de conocer si la clase política logrará acordar una reforma de pensiones como las personas están necesitando.

Estamos a la espera de conocer de qué manera podremos enfrentar la demanda al sistema de salud público que tiene largas listas de espera, donde faltan especialistas y los tratamientos y cirugías se demoran demasiado.

Estamos a la espera de que la educación pública logre ser de verdad el lugar de la esperanza para que las familias, sus hijos e hijas experimenten que sus talentos y preparación los llevará a alcanzar sus proyectos de vida.

Estamos a la espera de que la convivencia nacional, con la violencia y el malestar expresados en barrios, micros, familias, colegios y escuelas, pueda ser tomada en serio por las autoridades políticas (de todos los partidos) apoyados por otros liderazgos que tienen poder para cambiar las cosas.

La impotencia de quienes no están a cargo de la conducción del país es ver como la clase dirigente (las elites como las definió un informe del PNUD) no logran ponerse de acuerdo. Desde 2006, en el primer gobierno de la Presidenta Michelle Bachelet, que existe formalmente la decisión de hacer una reforma previsional. Conocida como la Comisión Marcel, creada por decreto presidencial, estaba integrada por Harald Beyer, David Bravo, Axel Christensen, Regina Clark, Álvaro Clarke, Rossana Costa, Martín Costabal, Margarita María Errázuriz, Alejandro Ferreiro, Augusto Iglesias, Alejandra Mizala, Andrea Repetto, Jaime Ruiz-Tagle, Andras Uthoff y el actual ministro de Hacienda, Mario Marcel. La comisión tenía como objeto “elaborar propuestas para reformar el sistema de pensiones establecido en el decreto ley Nº 3.500, de 1980″. Fueron 888 páginas de un trabajo profesional, transversal y riguroso. Las y los profesionales que participaron no estuvieron de acuerdo en todo, pero el espíritu de hace 18 años fue buscar un acuerdo por el bien común.

Para este 2025, el mayor desafío de la política será conducir acuerdos tanto con el gobierno que termina como con el gobierno que asumirá en 2026. Sin embargo, hay escepticismo y algo de apatía de lograrlos. Si tomamos como referencia el Informe sobre Desarrollo Humano en Chile de 2024, llamado “¿Por qué nos Cuesta Cambiar?”, una de las razones que dificultan ese cambio serían los llamados “villanos”, descritos como los liderazgos políticos y del gran empresariado. Entre las razones invocadas por las personas entrevistadas para el informe, se trataría de una elite que “no conoce los problemas de la gente y les falta voluntad para llegar a acuerdos”.

Desde el año 2014 hemos tenido presidentes y presidenta de los sectores políticos con representación parlamentaria, y ninguno ha tenido la varita mágica para solucionar los problemas sin recurrir a sus adversarios políticos. Es tiempo de acuerdos si queremos un mejor país.

Por Paula Walker, profesora Magíster de Políticas Públicas Universidad de Chile

Comenta

Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.