Columna: Día de Europa – “Unidad en la diversidad”

Las 27 banderas de la UE ondeando en el cielo. Foto: EC - Audiovisual Service


Por el Encargado de Negocios a.i. de la Unión Europea y los 18 Embajadores/as residentes de países de la Unión Europea en Chile (Alemania, Austria, Bélgica, Croacia, Dinamarca, España, Finlandia, Francia, Grecia, Hungría, Italia, Irlanda, Países Bajos, Polonia, Portugal, República Checa, Rumania, Suecia)

Hoy, Día de Europa, es un momento de celebración en el cual reflexionamos sobre los lazos únicos que unen los 27 países de la Unión Europea (UE). Nuestro lema “Unidad en la diversidad” adquiere un significado aún más profundo ahora que estamos marcando el vigésimo aniversario de la gran ampliación a la Unión en 2004, cuando 10 países se incorporaron a la vez solo 15 años después de la caída del muro de Berlín. Fue la mayor ampliación de la UE, tanto en términos de países como de población. Luego se sumaron tres países más y desde entonces la economía de aquellos nuevos Estados miembros ha crecido exponencialmente. En algunos casos se duplicó, mientras el flujo interno de productos dentro de la UE ha aumentado en más del 40% y se han creado 26 millones nuevo empleos.

La UE se formó como un proyecto de paz y de cooperación. Hoy más que nunca debemos defender el proyecto y sus valores frente a un escenario internacional complejo e inestable, con más polarización y menos multilateralismo.

El conflicto en Medio Oriente está cobrando devastadoras cifras de víctimas y requiere una acción decidida y urgente de la comunidad internacional. La UE pide el pleno respeto del derecho internacional y la implementación de la resolución 2728 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, incluyendo un alto al fuego inmediato en Gaza, la liberación incondicional de todos los rehenes y el acceso rápido a la ayuda humanitaria a escala para todos los palestinos en necesidad. Asimismo, la UE ha condenado los ataques de Hamas y de Irán a Israel, y reitera su solidaridad con el pueblo de Israel y su seguridad.

Banderas europeas frente al edificio Berlaymont, en Bruselas, Bélgica. Foto: EC - Audiovisual Service

Por otro lado, somos testigos desde ya hace dos años del regreso de la guerra en el continente europeo con la invasión ilegal y no provocada de Rusia en Ucrania. Nuestra prioridad es seguir apoyando a Ucrania, en línea con el artículo 51 de la Carta de Naciones Unidas sobre el derecho de legítima defensa, prestando todo el apoyo político, financiero, humanitario y militar necesario durante el tiempo que haga falta, y con la intensidad que se requiera, para alcanzar una paz justa y duradera. Una victoria rusa contra Ucrania no sólo tendría consecuencias catastróficas para Europa, sino también para el resto del mundo.

En este contexto geopolítico, para la UE es fundamental fortalecer sus alianzas con socios claves como Chile, con quienes compartamos el compromiso con la democracia, la paz y el multilateralismo. El Acuerdo de Asociación UE-Chile del 2002 ya había permitido fortalecer el diálogo político, duplicar el flujo de comercio bilateral con creces y diversificar la canasta exportada. Sobre esta base sólida, firmamos en diciembre del 2023 el nuevo Acuerdo Marco Avanzado UE-Chile que lleva nuestra relación de cercanía al siguiente nivel, impulsando valores e intereses comunes y fomentando el comercio sostenible y la inversión. Este acuerdo de última generación fue ratificado por el Parlamento Europeo en febrero del 2024, y está actualmente en su proceso de ratificación en Chile.

Hoy en día, la UE se posiciona como el tercer socio comercial de Chile y el primer inversor; un logro alcanzado gracias al interés compartido por los Estados miembros. Este objetivo se ve reflejado de forma más concreta en el compromiso de la UE por invertir en sectores claves para el desarrollo de Chile, como el litio y las energías renovables. El trabajo conjunto de empresas europeas y chilenas no solo crea capital, sino también fortalece el intercambio de tecnología, el conocimiento y la experiencia, lo que beneficia a ambas regiones.

Más allá del comercio, la relación entre Chile y la UE se extiende a un amplio espectro de áreas, como la acción climática, la educación, la investigación, los derechos humanos y la seguridad. Por ejemplo, se está llevando a cabo la Iniciativa Equipo Europa para el desarrollo del Hidrógeno Renovable en Chile para avanzar en la transición verde. Otro ejemplo es el papel de la misión de asistencia técnica sobre prevención y gestión de incendios realizada por expertos europeos a solicitud del Gobierno de Chile. Porque entre socios cercanos, la solidaridad y el aprendizaje mutuo son clave.

Este 9 de mayo, a solo un mes de las elecciones del Parlamento Europeo donde 400 millones de ciudadanos europeos van a votar, sirve como un recordatorio de los valores que dieron origen a la Unión Europea. Es un proyecto que sigue creciendo y evolucionando en su diversidad, pero que no está libre de riesgos y amenazas. Hoy, más que nunca y junto a nuestros socios, como Chile, debemos defender nuestros principios y seguir construyendo un mundo más justo y solidario para todos.