Columna Hans Eben: “Cuidado, el perro no muerde "

Reunión Ejecutivos empresa

"Lo importante es convenir que las señales que damos como lideres empresariales, políticos, sociedad civil, periodistas, ONGs, académicos y otros tienen un tremendo impacto en el hoy y en el mañana de nuestro entorno. Venerar un perro matapacos no es la razón de nuestros problemas hoy pero no tengo ninguna duda que ver a lideres de nuestro país con la camiseta del perro matapacos o bailando a su alrededor, tuvo y tiene un impacto hasta el día de hoy."



Una de las muchas maneras que un líder se comunica con sus equipos, seguidores o futuros seguidores es a través de señales. Entendamos señales como la manera no verbal de entregar información adicional sobre sus objetivos, intenciones, valores, expectativas u otros. Estas señales pueden ser simples gestos, tono de voz, lugar desde donde se está comunicando, símbolos que utiliza, formas de tratar a otros, respeto por las normas, etc. Todos, con nuestras señales, diariamente influimos en alguien de nuestro entorno, pero un líder puede influir a cientos, miles o millones de personas. Los líderes deben ser muy cuidadoso con las señales que quieren dar, y no solo con sus seguidores a quienes conoce mejor y sabe cómo pueden recibir el mensaje, pero también deben pensar de qué forma otros pueden estar percibiendo sus señales.

Las señales que entregan los líderes juegan un rol clave en construir confianzas, ya que transmiten sus valores, lo que los moviliza, para donde quieren ir y con quienes. Un gerente de una compañía puede hablar mucho sobre la importancia de seguridad, puede mandar mails al respecto, colocar afiches por meses y por todos lados, pero si entra a una fábrica sin los elementos de seguridad o lo ven hablando por celular en el auto, todo su relato se cae, por esas simples señales. Esto quiere decir que ese jefe es una mala persona, por supuesto que no, mal líder; tal vez. Tampoco podríamos señalar que todos los problemas de seguridad de la empresa se deben por la forma que el gerente entra a la fábrica, pero si eventualmente se pudiese concluir que tiene una cuota de responsabilidad en caso de accidente en la fábrica. Nadie se imaginaría a un gerente por los pasillos con una mascota llamada “matavacunas” para luego entrar a un directorio para discutir de la importancia que es vacunar a todos los empleados

Muchos hemos vivido ejemplos como los anteriores y hemos dado señales equivocadas como líderes, lo importante es convenir que las señales que damos como líderes empresariales, políticos, sociedad civil, periodistas, ONGs, académicos y otros tienen un tremendo impacto en el hoy y en el mañana de nuestro entorno. Venerar un perro matapacos no es la razón de nuestros problemas hoy pero no tengo ninguna duda que ver a lideres de nuestro país con la camiseta del perro matapacos o bailando a su alrededor, tuvo y tiene un impacto hasta el día de hoy. Poco, mediano o mucho el impacto puede ser discutible si quieren, pero la señal cuidado con el perro no muerde, es una señal que por decirlo menos nos confundió, confunde, desunió y desune. Hoy son otras las señales que necesitamos y no nos olvidemos de sus impactos.