SEÑOR DIRECTOR:
Hace algunos días recibimos la increíble noticia del reconocimiento a la profesora chilena de música Luciana Ortega, destacada como una de las 50 mejores docentes del mundo en los Global Teacher Prize. Luciana fue escogida por su innovadora labor al conectar la sala de clases con el patrimonio campesino chileno, mostrando una enorme pasión y compromiso por la enseñanza de la música y nuestras raíces.
La profesora Ortega creció en la ciudad de San Carlos, cuna de grandes músicos chilenos como Violeta Parra. Proviene de una familia de mujeres cantoras que le transmitieron la importancia de preservar el folclor chileno. Con esa convicción, inició un camino a la docencia que no ha estado libre de obstáculos. Ha enseñado música en escuelas de alta vulnerabilidad, con escasez de instrumentos musicales, enfrentando el desafío de conectar con los intereses de los estudiantes del siglo XXI. Con todo, revolucionó la educación musical al llevar técnicas de la música tradicional a la música popular, adaptando modelos de enseñanza del arpa a su contexto. Gracias a esto, junto a sus alumnos fundó el grupo “Ensamble Arpas de Ñuble”, que ha llegado a grandes escenarios de Chile y el mundo.
Luciana será parte de un prestigioso encuentro de docentes destacados que se realizará en Dubái. Un viaje que lleva a esta profesora, y a nuestras raíces chilenas, al otro lado del mundo. En una realidad cada vez más globalizada y tecnológica, su ejemplo es un tesoro invaluable que nos recuerda la importancia de tener docentes de calidad que cambian vidas.
Verónica Cabezas
Directora ejecutiva de Elige Educar
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