Dejar odios y extremismos

SEÑOR DIRECTOR:
Vivimos en tiempos de extremos y de odios: Trump trata a Canadá como un estado más de su país, Maduro llama a todos lacayos del imperialismo. Mientras Milei trata a Boric de zurdo, éste pretende humillar a la comunidad judía en Chile al no asistir a sus ceremonias, pero sí a las palestinas.
Es que, si bien somos seres racionales, somos también profundamente emocionales. Eso hace que nos movamos en extremos: si la izquierda es mala, la derecha es buena; y mientras más derecha, mejor. Y al revés. Nuestro matón podrá ser un matón, pero es el nuestro.
En Chile, Daniel Jadue (temporalmente alejado de las canchas) y el folklórico Artés por la extrema izquierda, mientras Kast y el pintoresco Johannes Kaiser por la ultraderecha, parecen querer convencernos de que somos enemigos mortales, donde el triunfo de uno se logra sólo con la derrota del otro.
Abraham Lincoln dijo: “No somos enemigos, sino amigos; no debemos ser enemigos. Aunque la pasión haya tensionado, no debe romper los lazos de nuestros afectos”. A lo mejor así resucitamos a lo que él llamó “los mejores ángeles de nuestra naturaleza”.
Marcelo Muñoz Perdiguero
COMENTARIOS
Para comentar este artículo debes ser suscriptor.
Lo Último
Lo más leído
1.
2.
3.
4.
5.
6.