Foco de las políticas públicas

SEÑOR DIRECTOR:
Un interesante debate se abrió en los últimos días respecto de la obligación de imprimir boletas en el comercio. Una medida que busca, según las autoridades, poder fiscalizar más y mejor a aquellos que aún no se han formalizado, pero que deja entrever un tema que poco a poco se va metiendo en los reguladores y la opinión pública: el fin del efectivo.
Según un estudio de la consultora McKinsey & Company, Chile es el país que tiene el menor porcentaje de personas que tienen al efectivo como método de pago favorito, solo un 13%, y quien le sigue, Argentina, escala rápidamente al 25%. Una muestra de cómo el uso -o no uso- del efectivo tiene relevancia cuando adoptamos políticas públicas.
El poder de permanencia del efectivo puede atribuirse a dos factores: uno, los miles de comercios que solo aceptan ese medio de pago, y el otro es que mucha gente tiene empleos informales y generalmente reciben su salario en efectivo. Por eso, aumentar el número de comercios que aceptan tarjetas o billeteras digitales contribuirá en gran medida a popularizar el uso de medios de pago distintos del efectivo.
Al final son ellos, los pequeños y medianos comerciantes y emprendedores del país, quienes deben estar en el centro del foco de las políticas públicas. La conversación ya se abrió -y con esto- una tremenda oportunidad para poder dar un paso adelante en la formalización y digitalización de miles de personas que trabajan en pos de una economía más inclusiva y sobre todo, digital.
Matías Spagui
Director Senior Mercado Pago Chile
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