Incertidumbre
Por Eugenio Guzmán, decano Facultad de Gobierno, U. del Desarrollo
Uno de los rasgos más característicos de este proceso electoral es la incertidumbre. Sin perjuicio de ello, los resultados del pasado domingo prima facie entregan información relevante respecto del próximo escenario político.
En primer lugar, la participación fue levemente superior a la de 2017 (47,3 vs. 46,7%), e inferior al plebiscito de 2020 (51%). Sin embargo, una comparación que cabe resaltar es la diferencia con las elecciones de mayo de 2021 (43% aprox.) que en concreto se traduce en que alrededor de 675 mil personas más fueron a las urnas en esta ocasión. Luego, cabe preguntarse si este aumento tuvo un impacto en el resultado. Algunos ejemplos: en la región de Tarapacá en mayo votaron 96.238 personas, mientras que el domingo 110.489, un 14,8% más; en la RM votó un 9,7% más y en Biobío el aumento fue de 13%. Luego, es claro que hubo mayor movilización electoral y probablemente ella no fue homogénea, por lo tanto podría explicar los resultados.
Segundo, también relacionado, es el porcentaje de nulos y blancos que en la elección de mayo 2021 alcanzó un 7% y en noviembre solo un 1,2%. Si bien se podría decir que eso es normal, la verdad que no lo sería tanto en un contexto de voto voluntario, más aún si se trata de que más de 380.000 personas anularon el voto en mayo respecto de noviembre.
Tercero, se ha afirmado que esta elección hizo colapsar el sistema de partidos llamados “tradicionales”. La verdad es que la mayoría de ellos bajaron su votación respecto de la de diputados de 2017. Es el caso del PDC, PPD, RN, UDI, PRSD y PH. Pero también hubo disminuciones en partidos “no tradicionales”, tales como RD, Evópoli, PRO y Ciudadanos. Otros, como el PC, PEV, FRVS, experimentaron aumentos, sin embargo, se trata de partidos con menos del 3% de la votación total; la única excepción es el PC, que aumentó de 5,3% a 7,4%. No obstante, muchos de estos resultados reflejan el modo de conformación de listas, las exclusiones y blindajes distritales. Ahora bien, hay excepciones como el Partido Republicano y el Partido de la Gente, los que obtienen el 10,5% y 8,5% de los votos respectivamente, los que a su vez obtienen, hasta ahora, 14 y 6 diputados cada uno.
Pero además de los votos, la efectividad importa, vale decir, cuántos candidatos presentaron y cuántos fueron elegidos. En este sentido, los más efectivos fueron RN, UDI, PS y Convergencia Social, en ese orden, con más de un 30% de sus candidatos electos.
Finalmente en este respecto, un hecho que vuelve a repetirse como resultado del cambio de sistema electoral es la fragmentación del sistema de partidos. En concreto, en esta elección compitieron 27 partidos, resultando 21 que tendrán representación, lo que deja en evidencia la atomización existente, la que ciertamente es mayor en el mundo de izquierda y que de cualquier modo afectaría la gobernabilidad.