Innovando para la confianza

En este último tiempo se ha hablado mucho del propósito de las empresas, pero qué buscan las empresas cuando definen su propósito? Las más antiguas seguramente no olvidar sus orígenes, para otras, tener claridad el por qué existen o tal vez simplemente quieren impregnar más humanidad a la empresa. Seguramente es un poco de todo, pero lo que está claro, que empresas con un propósito poderoso son mas atractivas y es más fácil establecer relaciones con los diferentes actores del ecosistema de las empresas. La palabra relación, nos lleva de inmediato a la dimensión tiempo, especialmente a mediano o largo plazo, para así poder desarrollar un vínculo. Si queremos establecer un verdadero vínculo, avanzar hacia un futuro común y crecer juntos, la empresa debe contribuir a construir confianzas y preocuparse de ser consistente.

Si acordamos que una de las múltiples definiciones de innovación es crear el futuro y para un futuro común se requiere de construir confianzas, entonces el mejor camino para las empresas es innovar con impacto social. Adelantarse a los consumidores es una potente manera de construir confianzas y cuando la innovación sorprende continuamente, la empresa es más consistente. Por qué muchos creen en esta relación tan directa entre innovación, confianza y consistencia? Simple, quién no quisiera mantener un vinculo con quien está constantemente entregándome nuevas soluciones, haciéndome la vida más fácil, más entretenida o visto de otra manera, adelantándome un mejor futuro? Cualquiera quisiera mantener una relación con una empresa así.

Toda innovación, entre mayor impacto exponencial al mayor número de personas y entre más frecuentemente es, mayores posibilidades de fortalecer la confianza y consistencia. Hoy la empresa, si quiere fortalecer su propósito, no solo requiere construir confianza y ser consistente con sus consumidores sino con todos los actores que se involucran con la empresa. Es la innovación la llamada a construir estos vínculos a ratos debilitados con nuestras colaboradores, comunidades, proveedores, consumidores y accionistas. Teniendo este vínculo entre todos los actores, la innovación colaborativa es posible. Hoy sin colaboración no hay innovación con el impacto social requerida por nuestro país y el mundo. Las empresas deben pensar en la innovación como una forma de hacer crecer competitivamente su negocio y como una forma de la empresa de contribuir a las confianzas de nuestra sociedad.

Hans Eben

CEO de Westfalia