Justicia internacional bajo amenaza
SEÑOR DIRECTOR:
Resulta profundamente decepcionante que se haya aprobado en la Cámara de Representantes del Congreso norteamericano un proyecto de ley que permitiría imponer sanciones al personal de la Corte Penal Internacional CPI, una institución judicial internacional independiente dedicada a combatir la impunidad de los crímenes más graves y abominables conocidos por la humanidad, como el genocidio, los crímenes de guerra, de lesa humanidad y el delito de agresión tipificados en el Estatuto de Roma. La resolución busca proteger a Israel como su aliado principal, cuyo Primer Ministro Benjamin Netanyahu y su ex ministro de Defensa Yoav Gallant, han sido imputados como criminales de guerra por dicho Tribunal. El proyecto vulnera los principios fundamentales de la función jurisdiccional de los tribunales internacionales y compromete su autonomía e independencia en sus resoluciones judiciales.
La CPI forma parte de un sistema global de justicia internacional del que Estados Unidos fue uno de los principales arquitectos a partir de los juicios de Nuremberg y Tokio al termino de la Segunda Guerra Mundial. Si el Senado norteamericano sigue su ejemplo, perjudicará gravemente los intereses de todas las víctimas del mundo y la capacidad del gobierno estadounidense para defender los derechos humanos y la causa de la justicia, promoviendo la cultura de la impunidad, la no rendición de cuentas y dejando a las víctimas sin la debida reparación.
Nelson Hadad Heresy
Académico y exembajador de Chile
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