La importancia de la correcta evaluación crediticia
Es lamentable que algunos parlamentarios aún no aquilaten la importancia de que el sistema financiero cuente con la mayor cantidad de información posible sobre la situación crediticia de los deudores, para así evitar sobreendeudamiento y tarificar acorde al real nivel de riesgo.
Pese a que los niveles de endeudamiento del país se encuentran dentro del promedio de países de la OCDE, controlando por el nivel de ingresos, es imprescindible seguir perfeccionando el marco regulatorio del mercado financiero para mejorar la información crediticia y evitar el sobreendeudamiento de las familias.
En esta línea, el proyecto de ley enviado por el Ejecutivo en diciembre pasado que crea un registro de deuda consolidada y que será administrado por la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) es un buen avance en esta materia. La iniciativa crea un nuevo registro de deuda, amplía los aportantes de información crediticia a ser consolidada, establece derechos de los deudores en materia de acceso, de actualización, rectificación o complementación y a la cancelación de datos.
Lo cierto es que ya el mercado ha avanzado en el proceso de consolidación. Los bancos, parte importante de las casas comerciales y las cooperativas bajo el perímetro regulatorio de la CMF ya entregan la información de las deudas que se consolidan en el informe de deudas. Según datos de la propia CMF, faltarían por incorporar la información de las mutuarias, el crédito automotriz y las cajas de compensación, lo que en conjunto no representa más allá del 10% del total de las colocaciones en este segmento.
Dado lo anterior, llama la atención las declaraciones del presidente de la comisión de Economía de la Cámara de Diputados, quien manifestó que los parlamentarios de oposición no percibían que esta iniciativa sea de gran ayuda para los consumidores, sino “más bien para que el sistema financiero esté informado del registro de deuda”. Resulta preocupante la escasa comprensión acerca de la importancia de que el sistema financiero cuente con la mayor información posible acerca de los deudores, porque ello finalmente va en beneficio de la propia población. Por de pronto, una evaluación más precisa de la situación crediticia evita episodios de sobreendeudamiento -es fundamental evitar que las personas adquieran compromisos que vayan más allá de su real capacidad de pago-, que fácilmente pueden llevar a caer en el crédito informal, que opera fuera de todo el perímetro regulatorio; asimismo, en la medida que las instituciones financieras desconocen el verdadero nivel de riesgo de sus clientes, a la larga se ven en la necesidad de repartir este riesgo entre todos los deudores. De allí el enorme beneficio que conlleva el hecho de que el sistema financiero pueda tarificar de manera mucho más precisa.
Más allá de que existen caminos alternativos para lograr el mismo propósito, es indispensable que los hacedores de políticas públicas sean conscientes de la necesidad de seguir perfeccionando la regulación del mercado financiero. Chile es un ejemplo de capilaridad y bajos costos en la región en materia de acceso al crédito y es muy importante seguir modernizando y ampliando la información disponible para la evaluación crediticia.