La ventana del litio
SEÑOR DIRECTOR:
Esta semana conocimos un informe de Cochilco respecto de proyecciones del litio y Chile continúa en el primer lugar como productor de litio en Sudamérica, con 271 mil toneladas de LCE en 2023, y en segundo lugar detrás de Australia a nivel mundial.
El precio del carbonato de litio registró un fuerte descenso en 2023 y 2024, alcanzando a fines de julio de este año los US$ 12.000/ton (CIF Asia). Esto, debido a menores ventas de vehículos eléctricos, superávit en el balance de mercado para 2024 y 2025, y la reducción de subsidios a la compra de vehículos eléctricos. Pero los valores proyectados para un período de largo plazo (2029-2033) alcanzarían los US$ 18.280. Es decir, los precios de más de US$ 70 mil/ton que vimos en 2022 se habrían terminado.
Sin embargo, las proyecciones de demanda son positivas: el mercado sigue aumentando y las proyecciones indican que la demanda mundial de litio crecerá.
¿Qué hacemos como país frente a este escenario?
No solo debemos asegurar nuestra posición en el mercado, sino que además debemos hacerlo de forma eficiente, porque los precios proyectados requieren un foco significativo en los costes de producción.
Es de vital importancia evaluar si los esfuerzos que se están realizando en el marco de la Estrategia Nacional del Litio son efectivamente los que nos permiten cumplir con ambas cosas. El acuerdo SQM-Corfo, en el que es importante identificar cuál será la real envergadura de la resistencia de Tianqi y qué implicancias puede tener para los planes de producción, y los avances en otros salares, deben responder a los tiempos mundiales. No podemos perder las ventanas de oportunidad, ya que, con una caída del precio de más de US$ 50 mil/ton de un año a otro, hemos visto que efectivamente se cierran.
Victoria Paz
Economista y fundadora de Poder Económico