Lecciones y desafíos
SEÑOR DIRECTOR:
Las elecciones pasadas nos brindan dos grandes lecciones y desafíos para la democracia. Primero, el éxito de las candidaturas independientes, que lograron captar el 30% del voto y asegurar un 29% de las alcaldías, sugiere que la ciudadanía sigue depositando más confianza en personas que en marcas partidarias. De las alcaldías ganadas por el pacto de gobierno, un 40% es de independientes asociados, proporción que sube al 46% al caso de Chile Vamos y al 62% en el P. Republicano. Asimismo, la incapacidad de los partidos para obtener más del 16% en votos para concejales y consejos regionales, aun sumando independientes asociados a subpactos, apunta a una desconexión con el electorado.
Segundo, la escasa representación femenina, por debajo de los estándares internacionales, resalta la urgencia de legislar para superar los obstáculos estructurales. Sin una acción concreta, el sistema político seguirá arrastrando inequidades que afectan su legitimidad y diversidad representativa.
En conjunto, estos datos plantean advertencias. La consolidación de independientes muestra una tendencia hacia la personalización de la política que le resta profundidad programática al sistema político, debilitando los cimientos de una democracia que debería basarse en ideas y valores colectivos, más que en personalismos. La baja representación de mujeres resalta la necesidad de una política más inclusiva y diversa.
Esto exige un debate sobre el futuro del sistema de partidos políticos y las reglas electorales, para que las instituciones representen de mejor manera a toda la ciudadanía y avancen hacia una paridad real.
Julieta Suárez-Cao
Investigadora Núcleo CRISPOL, Instituto de Ciencia Política UC