Lo ambiental, gran deuda de los comisionados

SEÑOR DIRECTOR:

Si bien desde un principio se podía apreciar que la temática ambiental no estaba en el núcleo central de las preocupaciones de los integrantes de la Comisión Experta, la inclusión posterior en el índice de un capitulo XIII denominado “Protección del Medio Ambiente, Sostenibilidad y Desarrollo”, hizo renacer las esperanzas.

Sin embargo, al conocerse el articulado propuesto en dicho capitulo, así como el de “Derechos fundamentales, garantías y deberes constitucionales”, el sabor es amargo. No solo porque da la impresión de que retrocedimos a los años 80, sino que carece por completo de un sentido de urgencia ante la crisis ecológica y climática que estamos viviendo.

La imagen de un péndulo frente a la propuesta constitucional fallida refleja lo que ha ocurrido.

Por ejemplo, persistir en la consagración del derecho a vivir en un medio ambiente libre de contaminación, en vez de un derecho a un ambiente limpio, saludable y sostenible, que es lo que ha aprobado Naciones Unidas; o un derecho a un medio ambiente sano o ecológicamente equilibrado, es no comprender la necesidad que tenemos de gestionar las actividades humanas para proteger el entorno. Seguir pensando que la función social será la manera en que se podrá conservar el patrimonio ambiental y el desarrollo sostenible es desconocer por completo lo que ha sido la historia de su aplicación en los últimos 40 años.

Esperemos que en las semanas venideras, los comisionados pueden comprender que es necesario e indispensable abordar y consagrar normas que realmente permitan proteger nuestro medioambiente, pues depende de ello nuestra sobrevivencia.

Ximena Insunza Corvalán

Profesora Facultad de Derecho, U. de Chile