SEÑOR DIRECTOR:
Han pasado tres años desde que se anunció el cierre del Sename para dar paso al nuevo servicio de protección “Mejor Niñez”. Sin embargo, la implementación de estos cambios ha sido tan lenta que más de 100 niños y niñas siguen esperando atención.
El mejor regalo que podemos dar en este nuevo año es lograr la unidad política para que, sin importar las diferencias, pongamos a los niños y niñas primeros en la fila de nuestras prioridades.
Es necesario ampliar la cobertura de las residencias, entregar más recursos económicos e integrar el rol de todas las organizaciones que trabajan por la niñez. Solo así podremos reconstruir un sistema que los proteja y les permita crecer sin límites.
Darío Ovalle
Director ejecutivo de la Fundación Sembrar Futuro
