SEÑOR DIRECTOR:
Carla Miranda es una joven de Río Hurtado en la Región de Coquimbo, quien quiso emprender con un pisco artesanal aprovechando las uvas del predio familiar. Hoy, el pisco Don Verdejo es realidad gracias al apoyo que recibió a través del programa “Mi Primer Negocio Rural” de Indap. En Curepto, Región del Maule, Hugo Segovia produce porotos, lentejas y garbanzos con la asesoría técnica de Indap y puede con ello sacarle más rendimiento a sus cultivos. En tiempos de aguda sequía, más de 4 mil 700 pequeños productores fueron beneficiados por Indap con inversiones en riego, tecnificación y gestión de este recurso.
Detrás de ellos y otros miles de campesinos y campesinas de nuestro país hay historias de superación personal, rompiendo el círculo de la pobreza; de emprendimientos notables, transformando a pequeños agricultores en entusiastas empresarios. En suma, son familias chilenas que pueden acceder a nuevas oportunidades gracias a la inversión social de Indap.
En tiempos de campañas electorales, nuestro llamado es a ser responsables y respetuosos de las personas que día a día trabajan por cambiar sus vidas y la de sus familias. Que el precandidato presidencial del Partido Nacional Libertario y diputado, Johannes Kaiser, pida que se terminen los apoyos para ellos sólo habla del desconocimiento de un amplio sector que quiere trabajar para sacar adelante a los suyos.
Un planteamiento que hiciera en los mismos días en que se tuvo que corregir tras afirmar -erradamente- que en Chile se recibían 72 dosis de vacunas. Mientras ello ocurre, la gestión de Indap es reconocida junto a otras dos instituciones con el Premio a la Excelencia del Servicio Civil.
Santiago Rojas Alessandri
Director Nacional de Indap
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