Para Entender: El mes del Hotel O’Higgins, un reflejo del cambio de la agenda

Hace justo un mes, el lunes 24 de febrero, La Tercera destacaba en su portada los violentos incidentes que marcaban el inicio del Festival de Viña del Mar, un episodio que volvía a poner en entredicho la gestión de de Gonzalo Blumel en Interior y que tenía como símbolo los destrozos en un edificio icónico de la Ciudad Jardín: el Hotel O’Higgins, que días después anunciaría su cierre ante la compleja situación.

Hoy, el 24 de marzo, el avance del coronavirus se toma la portada y todas las páginas. Pero casi como una nota breve vuelve a aparecer el Hotel O’Higgins, esta vez anunciando que pronto reabrirá sus puertas. Lo que sí, su giro sería muy distinto al histórico: como potencial residencia sanitaria ante la falta de disponibilidad de camas en los principales hospitales de la región.

En cierta medida, el hotel y su improbable mes es una fotografía de cómo ha cambiado vertiginosamente la agenda. Atrás quedó la discusión sobre el cambio de gabinete, la campaña del plebiscito y las manifestaciones en Plaza Baquedano. Hoy la noticia volverá a ser los nuevos contagiados y el funcionamiento del país bajo cuarentena.

Así, entre las malas -y alarmantes- noticias que diariamente acarrea la llegada del coronavirus a nuestro país, ayer en la mañana La Moneda recibió una información positiva: por primera vez, desde el 18 de octubre, la aprobación del Presidente Piñera subía (seis puntos), llegando al 18%, en medio de la crisis por la pandemia mundial de coronavirus, según la encuesta Plaza Pública Cadem, correspondiente a la tercera semana de marzo.

El reporte señalaba, además, que el 43% de los encuestados tiene una evaluación positiva de la gestión que ha tenido el Mandatario en relación a la crisis desatada por el brote, 25 puntos más que su nivel de aprobación global. Y el ministro ministro de Salud, Jaime Mañalich, -cuestionado por su estilo frontal en algunos sectores, incluso del oficialismo- subía 11 puntos alcanzando un 25% de aprobación positiva.

Según fuentes de Palacio, la noticia fue recibida con tanta cautela que ni siquiera fue tema en las reuniones diarias para enfrentar la crisis. Porque la sensación que existe en La Moneda –señalan- es que la situación por el coronavirus es tan grave que el panorama puede cambiar de un minuto a otro. Tal como ya está al borde de modificar el destino del emblemático Hotel O’Higgins.