Políticas públicas para una inclusión exitosa
Por Rocío Espinoza, directora ejecutiva de Fundación MC
Como cada diciembre llega la semana de la Teletón y todos volvemos a hablar de la discapacidad. Sin embargo, la realidad de las 2.836.818 personas adultas en situación de discapacidad en Chile se vive día a día. Es necesario detenernos y pensar en cómo desarrollar políticas públicas exitosas para eliminar las barreras que enfrentan y que no permiten lograr la inclusión de estos chilenos y chilenas en el mercado laboral; cómo promover iniciativas que favorezcan su participación y contribución a la sociedad en igualdad de condiciones con herramientas concretas que impulsen y transformen sus vidas positivamente.
El estudio “Discapacidad y Mercado Laboral en Chile” visibiliza cifras dramáticas en el mundo de la discapacidad versus las personas sin discapacidad. Las diferencias de ingresos entre aquellos que se encuentran trabajando son amplias: las personas con discapacidad tienen un ingreso promedio de $308.200 al mes, mientras que el salario de aquellas personas sin esta condición es de $429.600. Quienes viven con este tipo de dificultades tienen un ingreso promedio 28,3% más bajo. Respecto de la tasa de participación laboral, las personas con discapacidad presentan un 61,7%, es decir, siete puntos porcentuales menos que la de los trabajadores sin discapacidad alguna. Destaca además que la situación se observa en mayor proporción en mujeres, en personas con bajos niveles de educación y bajos niveles de ingreso. Por ejemplo, un 9,9% de las personas en el quintil de ingreso más alto se encuentra en situación de discapacidad, mientras que un 17,9% de aquellos en el quintil de ingresos más bajo se encuentra en dicha situación.
Sumado a esto vemos que las personas con discapacidad deben incurrir en más del doble en gastos de salud que las personas sin discapacidad, considerando además que tienen menores ingresos. Es importante incorporar este tema en la discusión pública, pues se trata de un segmento invisibilizado y en situación de alta vulnerabilidad. Sabemos la gravedad de la crisis sanitaria y económica que estamos enfrentando, pero es ahora más que nunca cuando las organizaciones sociales debemos ser capaces de generar mecanismos que impacten estos índices, contribuyendo así con el mejoramiento de las políticas públicas en torno al tema.
Es indudable el profundo impacto positivo que puede generar la entrega de herramientas concretas de empleabilidad a las personas en situación de discapacidad, haciendo programas que van más allá de lo tradicional o de la meta legislativa, como los que estamos impulsando en MC con habilidades digitales. Esto es porque la rehabilitación no solo es física, sino que también pasa por dar oportunidades reales y concretas para salir adelante. Es transformar vidas de forma positiva y para siempre.
Hoy la Teletón nos invita a reflexionar, pero este no es un problema que solo ocurra cada diciembre, sino del día a día de más de 2 millones de chilenos. Impulsar prograrmas sociales con impacto positivo en lo profundo y con herramientas concretas para que cada persona pueda forjar un presente y futuro mejor es a lo que estamos llamados todos.