Putin y el derecho internacional



SEÑOR DIRECTOR

Rusia justificó los ataques a Ucrania como una defensa de la población prorrusa que ha sufrido un genocidio liderado por el gobierno ucraniano. Putin señaló que los ataques se sustentan en la legítima defensa descrita en el artículo 51 de la Carta de Naciones Unidas. Lo anterior, en virtud que Moscú lleva 8 años protegiendo a dicha población, otorgándole -a buena parte de este colectivo- la ciudadanía y la nacionalidad rusa.

Al respecto, puedo señalar que Rusia se extralimita en los alcances que tiene la obligación de los Estados de proteger a sus nacionales, ya que ésta refiere -formalmente- a una protección de tipo diplomática. A su vez, y en su justificación, Putin obvia la obligación internacional que tienen los Estados de abstenerse de recurrir a la amenaza o al uso de la fuerza contra la integridad territorial o la independencia política de cualquier Estado, olvidando también las condiciones que el derecho internacional exige para determinar cuándo se está en presencia de una amenaza a la paz y seguridad internacionales.

Así, Rusia no utilizó los espacios que ofrece el derecho internacional para recoger las potenciales acusaciones de responsabilidad por hechos internacionalmente ilícitos de Ucrania, por lo que se puede argumentar que la razón humanitaria rusa no es más que una simple excusa que busca disfrazar las verdaderas motivaciones y que no son otras que evitar las consecuencias geopolíticas que provocaría un acercamiento del gobierno de Zelenski a la Unión Europea y a la OTAN.

Pedro Díaz Polanco

Analista Internacional

Director de la Escuela de Administración Pública

Universidad Austral de Chile