Simplemente un fraude
SEÑOR DIRECTOR:
Impresiona la manera en que la dictadura de Maduro intenta blanquear el fraude cometido en las últimas elecciones presidenciales, utilizando diversas instancias pseudodemocráticas para autoconvencerse de que ha ganado. En esta ocasión, el Tribunal Supremo de Venezuela ha ratificado este engaño.
Mientras tanto, el Presidente Boric ha mantenido un camino coherente y firme, condenando adecuadamente el fraude electoral que ha presenciado el mundo y calificando al régimen de Maduro como una dictadura.
Es momento, entonces, de avanzar decisivamente por los canales políticos y diplomáticos para ayudar, desde esta parte del mundo, al pueblo venezolano que sufre bajo la dictadura chavista. Gran responsabilidad recae ahora en nuestro jefe de Estado, quien, gracias a su inmejorable posición, tiene la oportunidad de liderar esta labor en Latinoamérica.
Daniel Burgos Bravo