Transantiago: Cambiar todo para no cambiar nada

SEÑOR DIRECTOR

Esta semana conocimos la suspensión temporal del proceso de licitación de flota de Transantiago, primera parte del nuevo modelo definido por las autoridades para el sistema.

Después de dos años, aún no hay ningún avance real en la licitación, deteniéndose un proceso de licitación ya en marcha para modificar sus bases, en una demostración de improvisación y diseño incorrecto de incentivos advertidos por la industria, con los correspondientes costos reputacionales para el sistema.

Después de dos años, no tenemos nuevos operadores que mejoren el servicio, las actuales empresas son cada vez más grandes y monopólicos, los costos del sistema crecen mes a mes y la evasión está en niveles jamás vistos. Todo esto, detrás de una falsa imagen de renovación amparada en la renovación de menos del 15% de flota, realizada a través de tratos directos opacos para la ciudadanía.

Es hora de que los discursos pasen a los hechos, y los anunciados cambios que la autoridad ha hecho sean acompañados por un esfuerzo serio y responsable por licitar y, de una vez, generar los cambios que nuestro transporte público necesita.

Carlos Melo

Exsubsecretario de Transportes