Una tragedia anunciada
SEÑOR DIRECTOR:
Con gran consternación y tristeza recibí la alarmante noticia de que una explosión de un artefacto incendiario en el INBA ha dejado a 34 estudiantes heridos y cinco con riesgo vital. Esta situación era precisamente lo que los directivos de Santiago habíamos advertido a la autoridad comunal: si continuaban incumpliendo sus responsabilidades como sostenedores en cuanto a la aplicación de la normativa, la protección de los alumnos y la calidad del servicio educativo, las consecuencias serían devastadoras.
He sido testigo de la preocupante decadencia que han sufrido estos colegios en los últimos años. La violencia ha aumentado de manera alarmante, en gran parte debido a la ideologización excesiva de la autoridad municipal, que ha fallado en cumplir con sus deberes y en aplicar la ley. Esto ha creado un ambiente de impunidad, desprotección para las comunidades educativas y ha contribuido a la destrucción del patrimonio municipal.
Como directora de emblemáticos colegios de Santiago logré erradicar la violencia, lo que permitió mejorar tanto la convivencia escolar como los resultados pedagógicos. Mi experiencia me lleva a concluir que, si los adultos en estas comunidades educativas continúan desatendiendo sus responsabilidades y utilizan estos liceos como plataformas políticas para expresar sus ideologías, seguiremos enfrentando tragedias.
Sin embargo, creo firmemente que, con una gestión adecuada, aún tenemos la oportunidad de recuperar estos liceos emblemáticos. La excelencia en la educación pública es fundamental para el desarrollo de nuestro país y de nuestra sociedad.
Lilian Vicent T.
Exdirectora liceos Darío Salas y Manuel Barros Borgoño