Al ceviche se lo ama o se lo detesta: el pescado crudo, su protagónica acidez y el golpe de la cebolla generan una intensa pasión o un intransigente rechazo, pero nunca una cara de indiferencia ni menos una reacción de desinterés. Una polarización entendible pues los fuertes sabores de este plato, no apto para mañosos, exigen un paladar abierto o al menos entrenado, capaz de aventurarse a sensaciones fuertes o incluso inesperadas.

Pero la grandeza del ceviche está en su flexibilidad y generosidad, capaz de recibir en sus jugos distintos tipos de productos —desde merluza hasta pulpo, pasando por el camote, la palta, el ají rocoto y los camarones—, que solo exige dos grandes condiciones: que los ingredientes sean frescos y siempre bañados por una buena cantidad de limón.

Para alguna gente, sin leche de tigre —acá enseñamos cómo hacerla— no hay ceviche y puede que tengan razón. Pero como no somos dogmáticos, y nuestra misión es proponer alternativas fáciles y ricas, esta receta completamente vegana no tiene ningún producto del mar pero sí dos potentes ingredientes que los reemplazan con personalidad: el mango y el pepino (la verdura). Sencillo y refrescante, está cantado para cerrar un día caluroso o abrir un almuerzo en el balcón.

Ah: aunque sea más difícil de conseguir, recomendamos incluir la granada, ya que su dulzor y resistencia marcará toda la diferencia.

Ceviche de mango y pepino

Ingredientes (para 3-4 personas)

  • 1 pepino
  • 2 mangos
  • Jugo de 2 limones
  • 1 cebolla morada
  • 1/2 taza de granos de granada
  • Pimienta
  • Sal
  • Aceite de oliva

Preparación

  1. Picar el pepino, mango y la cebolla, y juntar en un bol grande.
  2. Añadir los granos de granada y aliñar con el jugo de limón, un pizca de sal, pimienta recién molida y un chorro de aceite de oliva.
  3. Cubrir el bol con film plástico o una tapa hermética y dejar reposar el ceviche en el refrigerador por unas 2 horas, para que los sabores se integren bien. Servir frío en copones o platillos hondos.