Al pan pita, y con mucha injusticia, se le ha vinculado por años a las dietas o los regímenes alimenticios, lo que recomiendan las nutricionistas cuando hay que bajar de peso, como si solo fuera la versión light y aburrida de la marraqueta o la hallulla. En realidad, como suele pasar con los alimentos estigmatizados, el pita es un producto maravilloso, que está mucho más vinculado al goce que a las restricciones, parte esencial de la dieta en Medio Oriente, un pan que es también un cubierto, receptor de tantos y tantos sabores.

Su principal gracia es que es muy fácil de hacer: requiere de menos fermentación que los panes tradicionales, tampoco hay que amasarlo y se puede cocinar incluso en un sartén.

Y su gracia secundaria es la versatilidad: si son suficientemente inflados pueden comerse rellenos, o si son más flacos se pueden usar como plato para ponerle encima desde hummus o baba ganush, si queremos ponernos mediterráneos, o guacamole o pebre, si la idea es mantenernos latinos.

Además se pueden convertir en chips, una manera fácil y rápida de variar en el picoteo, opción perfecta para hacer una fiesta diferente o darle más brillo a una noche de viernes. Lo único que hay que hacer es cortar los panes pita en triángulos y hornearlos por menos de diez minutos, para que queden crocantes, como unos nachos pero menos intensos.

Chips clásicos

• 8 pan pita
• 4 cucharadas de aceite de oliva
• Sal y pimienta a gusto

Chips orégano y paprika

• 8 pan pita
• 4 cucharadas de aceite de oliva
• 1 cucharadita de paprika
• 1 cucharadita de orégano deshidratado
• 1⁄2 cucharadita de ajo en polvo
• Sal y pimienta a gusto

Chips de limón picantes

• 8 pan pita
• 4 cucharadas de aceite de oliva
• 3 limones verdes o sutiles
• 1⁄4 cucharadita de pimienta cayena
• Sal a gusto

Para chips clásicos

1. Calentar el horno a 180º. Cortar los pan pita en triángulos. Mezclar los triángulos con el aceite de oliva, sal y pimienta.
2. Poner los triángulos en una bandeja forrada en papel mantequilla y hornear por 8 minutos o hasta que estén dorados.

Para chips con sabores

1. Encender el horno a 180º. Cortar los pan pita en triángulos. Mezclar las especias con la sal, para que sea más fácil de esparcir sobre los panes pita.
2. Mezclar los triángulos con el aceite de oliva, sal y especias. Llevar al horno por 8 minutos o hasta que estén dorados.