Sí, sabemos que no es temporada de frambuesas, pero elegimos esta fruta porque es más bonita, porque se puede conseguir congelada durante todo el año y porque las fotos nos quedaron muy bien. Pero esta receta de mermelada puedes replicarla con cualquier otra fruta dulce y ácida como esta: frutillas, moras, duraznos, damascos, membrillos, incluso naranjas o manzanas.

Es muy fácil: solo necesitas planificarte un poco, pues hay que dejar la fruta macerando en el azúcar durante varias horas —idealmente toda la noche—, y ser capaz de revolver durante un buen rato la olla. Y tener buenos frascos de vidrio herméticos a mano, pues eso te permitirá guardar la mermelada por varios meses, y así aprovechar el trabajo de un día por todo el semestre.

Perfecta para cuando en la feria encuentres mallas en oferta, o si tienes un árbol frutal que de pronto se rebalsa de fruta madura, la mermelada es un gran método de aprovechamiento de los recursos. Es verdad que tiene mucha azúcar, pero no se trata de comerla a cucharadas —al menos no cuando alguien te esté mirando—, sino de no desperdiciar los alimentos.

Mermelada de frambuesas

Ingredientes (para 1,5 kilogramos)

  • 1 kg de frambuesas
  • 800 gr de azúcar blanca

Preparación

  1. En una olla grande con agua hirviendo, esterilizar los frascos y tapas durante cinco minutos. Usar pinzas o tenazas para ingresarlos y sacarlos del agua. Pasado el tiempo, secarlos sobre papel absorbente o, idealmente, una rejilla. Es muy importante que el gollete y la tapa queden muy secos, para conseguir un correcto vacío.
  2. Lavar bien todas las frambuesas. Luego, ponerlas junto al azúcar en una olla grande, mezclar y dejar macerar durante toda la noche.
  3. Al día siguiente, cocinar las frambuesas a fuego lento, revolviendo constantemente para que se disuelvan y no se peguen ni quemen en el fondo.
  4. Cuando la fruta comience a hervir, mantener la cocción por siete minutos, o hasta obtener la consistencia deseada, y retirar del fuego. Dejar enfriar por unos minutos y, con cucharón bien limpio, pasar la mermelada a los frascos. Se puede consumir de inmediato o conservarla durante meses en un espacio oscuro, fresco y seco.