La hora del té y la clásica once son momentos para disfrutar con quienes más queremos. Ya sea con tortas, queques o galletas de distinto tipo, las recetas dulces son una invitación a compartir y a crear momentos irrepetibles, de la mano de sabores reconfortantes. Y no, no te sientas culpable por estas pequeñas indulgencias. No solo te las mereces-estamos seguras-, sino que además forman parte del balance en el que siempre se recomienda vivir. Porque junto con la vida saludable y las ensaladas puede convivir siempre un rico postre.