Este producto le sacó el sarro a mi hervidor y sin dejar ningún olor
Si más que un electrodoméstico tu hervidor parece un yacimiento de litio, entonces este removedor es lo que necesitas. Libre de aromas, sabores y completamente natural, es fácil de usar y entrega grandes resultados.
Sé muy bien que el interior del hervidor hay que limpiarlo con cierta frecuencia, al menos una vez al mes, para que dentro de él no se acumulen gruesas cantidades de sarro. A pesar de eso, no lo hago nunca. ¿Por qué soy así?
Tantas cosas sencillas que hay que hacer y que sé que hay que hacerlas, por el bien de los aparatos, el mío y el de la humanidad que me rodea, pero que igual no las realizo. Tengo clarísimo que debo cambiar el cepillo de dientes una vez que se pone chascón, que la lavadora debe tener una limpieza de tambor mensual —la cual se hace solo apretando un botón— y que no hay que mezclar en ella la ropa blanca con la de color. ¡Lo sé, lo sé, lo sé! Pero ante esta realidad vaciada de épicas y aventuras, mi atrofiado instinto de rebeldía se consuela con eludir estos procedimientos y poner a prueba el destino. No seguir las instrucciones del producto es lo más cercano a la valentía por estos días.
Pero las consecuencias de estas micro insumisiones no tienen nada de emocionante: en el caso del hervidor, lo que único que obtengo es un montón de sarro, duro como un yacimiento, que hace que el fondo del recipiente se parezca más al Salar de Atacama que a un electrodoméstico.
También sé que para remover ese sarro hay que preparar una alquimia casera con vinagre blanco y bicarbonato, la cual sacará completamente el mineral pero dejará el hervidor con un aroma y gusto a cebollas en escabeche que no quiero para mi té de la mañana. ¿Solo hay que lavarlo bien con detergente? Eso hice la última vez y terminé desayunando un café con sabor a pichanga.
Por eso resultó un agradable descubrimiento este producto de FreeMet, especialmente elaborado para combatir el sarro: de hecho se llama así, Removedor de Sarro, sin seudónimos ni sobre nombres, pero principalmente sin otro aroma que el de una agradable, neutra e higiénica acidez.
¿Por qué se llena de sarro mi hervidor?
Antes de intentar sacar estos residuos —que en mi hervidor ya estaban petrificados como fósiles milenarios tras muchos meses (di la verdad, Rosa: años) sin limpiarlo—, no está de más entender por qué se forman y acumulan.
En Chile, este desagradable fenómeno ocurre porque gran parte del agua potable que consumimos proviene de ríos cordilleranos, muy ricos en minerales como carbonatos de calcio y magnesio, que si bien no son nocivos para la salud —de hecho aportan a nuestra nutrición—, sí hacen que el agua sea muy “dura”.
Esta dureza es la que se manifiesta en griferías o cañerías, que se desgastan más rápido o retienen sedimentos, y también en electrodomésticos como los hervidores, que al calentar el agua consiguen que los minerales se separen y se queden en el fondo. Algo que sucede con mayor velocidad si dejamos que el agua hervida se enfríe y permanezca en el hervidor.
Por eso, el primer consejo es siempre vaciar el recipiente una vez que haya hecho ebullición: ya sea hirviendo solo la cantidad de agua que se va a usar o bien pasándola a un termo, para así utilizarla más tarde y no gastar energía de más. Eso retardará la aparición del sarro, aunque no la evitará por completo.
Lo puedo comprobar yo, que no me rebelo ante el uso del termo, pero que así y todo terminé formando verdaderas losas en el fondo del hervidor.
Sácale el sarro
Suficiente de explicaciones. ¿Por qué el Removedor de Sarro Freemet es una gran opción? Primero, porque es muy fácil de usar y casi imposible equivocarse: hay que ponerle al hervidor un litro de agua y una cucharada de este producto, esperar entre cinco y diez minutos a que actúe, agitar bien y enjuagar.
Listo. Si hay costras de sarro muy aferradas, que es lo que me ocurrió a mí, puede que convenga hacer hervir el agua con el producto, lo que aumentará su efectividad. También hay que esperar a que actué unos diez minutos luego de la ebullición, agitar y, cuidando de no quemarse, enjuagar.
Debo decir que mi sarro era tan prehistórico que tuve que usar una escobilla para removerlo completamente. Pero también tengo que agregar que en el proceso no hubo ningún olor desagradable, todo pulcro y sencillo, y el hervidor quedó no solo impecable sino que además listo para ser usado de inmediato.
Como todos los productos de FreeMet, su Removedor de Sarro proviene de ingredientes naturales —de hecho, es ácido cítrico de grado alimenticio—, absolutamente biodegradable, libre de cualquier contaminante y/o irritante de la piel, y viene en un digno frasco de vidrio que invita a ser reutilizado o reciclado.
En estas condiciones, sí dan ganas de rendirse a los mandatos domésticos contemporáneos y hacer lo que hay que hacer. ¡Por un hervidor limpio y un té sin sarro!
*Los precios de los productos en este artículo están actualizados al 6 de octubre de 2023. Los valores y su disponibilidad pueden cambiar.
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