Pleno invierno, se anuncia lluvia para el fin de semana, te sobra el tiempo pero te falta un panorama casero. Están todas las condiciones, entonces, para ponerse a cocinar un estofado de carne, una preparación que perfumará tu casa durante varios días con ese olor que solo se obtiene con la comida hecha sin apuro.

Es fácil pero largo. Si te pones a cocinarlo a la una de la tarde, pensando en el almuerzo, terminarás comiendo a las seis, cuando ya esté oscuro y todos en casa se hayan ido por una hamburguesa. La recomendación es comenzar temprano o, mejor aún, prepararlo el día anterior, sin la presión del reloj, lo que no solo te quitará estrés sino que mejorará el sabor y la consistencia del plato, pues un reposo largo, como también me pasa a mí, es lo que necesita este plato para brillar.

La gracia de los estofados y su cocción lenta es que le sacan el máximo brillo a cortes de carne que parecen no tenerlo. Acá tenemos una selección de los más comunes, todos útiles para esta receta, que en una olla normal toma entre tres y cuatro horas. Si tienes olla a presión, el tiempo se reduce a la mitad, pero a pesar de eso no hay que acelerarse: con un estofado, el que se apura llega último.

Estofado de carne al vino

Ingredientes para 4 a 6 porciones

  • 800 g de carne para olla picada en cubos (choclillo, sobrecostilla, asiento)
  • ¼ de taza de harina
  • 1 cebolla mediana en cubos pequeños
  • 2 zanahorias en cubos pequeños
  • 1 taza de apio en cubos pequeños
  • 2 dientes de ajo rallados o machacados
  • 2 cucharadas de concentrado de tomate
  • 1 cucharadita de aliño completo
  • 1 taza de vino tinto
  • 600 ml de caldo (de carne o verduras)
  • Sal y pimienta a gusto.

Preparación

  1. Sazonar la carne picada con sal y pimienta a gusto. Espolvorear harina sobre la carne y mezclar hasta que cada trozo esté cubierto con una capa uniforme.
  2. Calentar una olla de fondo grueso a fuego medio alto y añadir una capa fina de aceite. Dorar ahí los cubos de carne por todos sus lados, trabajando en tandas para que se doren bien, con suficiente espacio entre ellos para que la humedad escape. Una vez sellados, retirar los trozos de carne a un recipiente y reservar.
  3. Cuando toda la carne esté dorada, agregar a la misma olla, con un poco más de aceite si hace falta, todas las verduras. Sazonar a gusto con sal, pimienta, tomillo y aliño completo, y cocinar por unos minutos raspando, bien el fondo con el líquido que suden las verduras. Añadir el concentrado de tomate y revolver bien.
  4. Agregar el vino para terminar de desglasar la olla y cocinar por unos tres minutos o hasta que el aroma alcohólico se haya evaporado. Devolver la carne a la olla junto a todos los jugos que se hayan acumulado en su recipiente, cubrir con caldo, tapar y cocinar a fuego bajo por tres a cuatro horas (dos horas si es en olla a presión). En olla normal, mantenerla tapada completamente las primeras dos horas y semicubierta la tercera, revisando que el nivel de líquido no baje demasiado y corrigiendo con agua o más caldo para que la carne siempre esté bien cubierta. Cocinar sin tapa la ultima hora para espesar.
  5. Corregir la sazón una vez que la salsa tome punto y servir sobre puré de papas, arroz blanco o una pasta larga.