Esta semana en Club Paula Cocina tuvimos una clase para conocer en detalle acerca del arte del maridaje y la degustación de vinos. Junto con Carolina Leiva, bartender y mixóloga certificada WSET, pudimos aprender sobre los distintos espectros y variedades de esta bebida que se produce en Chile.
Lo que debes saber sobre un vino
Carolina explicó como los distintos valles de Chile, su clima y paisaje, hacen que tengamos diferentes y variados vinos. Durante la clase se degustaron tres tipos: blanco, rosé y tinto. Una de las apreciaciones que hizo Carolina es que los vinos pueden hablar. Al catar y degustar el vino, este puede decirte a través de su sabor y aroma cual es el complemento perfecto para él.
Un ejemplo es que al degustar un sauvignon blanc se puede sentir un aroma refrescante con sabores frutales. Estos pueden intensificarse cuando lo acompañamos con un cítrico. Es por eso que comúnmente acompañamos al vino blanco con un ceviche, pero se puede innovar con otras preparaciones como un pie de limón o bombones de maracuyá.
Secretos para elegir y apreciar un buen vino
Otro de los aspectos importantes que hay que tener en consideración a la hora de escoger un buen vino, es saber leer la etiqueta, pues contiene toda su información, desde su origen hasta como se debe consumir. Siempre deben fijarse en la denominación de origen, para conocer en qué valle se produjo, además del año, para saber si es un vino fresco o de reserva que podamos conservar.
Para la experta, no existe un maridaje perfecto como tal, siempre va a depender del gusto del consumidor, sin embargo, lo que recomienda Carolina es hacerlo a conciencia. Reconocer bien los aromas del vino y los gustos que se pueden apreciar en el paladar. Esto es lo que dirá como potenciar tu vino.
¿Cómo tomar una copa? nunca desde el cáliz, siempre del tallo o su parte inferior para no modificar la temperatura de nuestra bebida. Existen muchas copas para los distintos tipos y variedades del vino pero la clásica que siempre servirá es la estilo bordeaux. El cristal y su porosidad son otros de los factores que pueden potenciar la experiencia del vino.
Así mismo otra de las enseñanzas es que cuando catamos y degustamos el vino el aroma se asocia a una característica positiva, por otro lado si hablamos de olor, se considera un aspecto negativo.