Las pieles de las mujeres asiáticas, pálidas pero a la vez resplandecientes, prácticamente estancadas en una eterna juventud donde no existen imperfecciones ni arrugas, capturan nuestra atención -extrañamente- solo demasiado reciente. De hecho, a nivel mundial la apertura de tiendas enfocadas en cosméticos japoneses, chinos o coreanos es bastante escasa. La culpa quizás se deba a la desconexión entre Oriente y Occidente y a nuestras diferencias culturales, pero aun así, al menos físicamente, aspiramos a convertirnos en el otro.
En China existe una expresión que se emplea para describir el aspecto físico de los occidentales: 'gao bi shen mu', que se traduce literalmente como 'alta nariz y ojos profundos'. Mientras que los asiáticos, en general, se caracterizan por tener una 'baja nariz y ojos pequeños y largos'. Por supuesto que estos últimos rasgos no son el ideal al que ellos aspiran, sino que desean la alta nariz y los ojos profundos occidentales. Esto se repite en Corea del Sur, donde las cirugías estéticas son tan usuales como los procedimientos odontológicos. "Una vez en Corea me hice un diagnóstico para una cirugía estética. Siempre tuve este cuento de niña donde quería ser más chilena porque sentía que no encajaba", cuenta Sang Jin Yun, hija de padres coreanos y socia de la tienda de cosméticos coreanos Nude Face Cosmetics. "Me quería agrandar los ojos, pero finalmente no lo hice. Allá es muy común que los papás les regalen esta cirugía a sus hijas cuando cumplen 15 años".
Esta especie de preferencia occidental se ve reflejada también en una de las bases fundamentales que dan forma a la cosmética asiática: la búsqueda de una piel pálida. En un contexto histórico, existe una norma cultural en la que la piel oscura se ha asociado durante siglos al trabajo en el campo y, por ende, a la pobreza. La piel blanca, en cambio, es símbolo de un nivel socioeconómico alto que supone más éxitos y oportunidades. "En Corea hace muy poco que están abriéndose a lanzar cushions (un formato de base con esponja) de tonos más oscuros. El whitening es algo aún muy común. No es blanquear, es llevar la piel iluminada e hidratada. Aun así, todos los productos cosméticos en Corea tienen un poco de tone-up para lucir un cutis más blanco que el natural", explica Carolina Burgos, de Arumi Korean Cosmetics, la primera tienda dedicada a la venta de cosméticos coreanos en nuestro país.
Aunque pareciera que Oriente busca asemejarse a Occidente físicamente, la cosmética asiática -que destaca por la observación y aplicación de los ingredientes naturales que tenían a la mano- se abre paso en Occidente. La primera tienda de cosmética facial china fue fundada en 1628. Se trata de Dai Chun Lin, marca que recibió el nombre de su fundador, un cosmetólogo que sorprendió al emperador Qianlong al crear los primeros polvos faciales perfumados del mundo. En Corea, en cambio, existe una larga tradición familiar enfocada en el cuidado de la piel. "Mi mamá nos recalcó que teníamos que tener el pelo y las uñas lindos, todo siempre bonito y perfecto. Ni hablar cuando no nos habíamos desmaquillado. Y si me ve en una posición en la que se me arruga el cuello, me lo comenta", dice Sang Yin. Y Carolina, de Arumi Korean Cosmetics, complementa: "Una gran diferencia es que las asiáticas, en especial las coreanas, cuidan su piel desde que nacen. Las han instruido en esto, es una tradición".