Cómo lavar la loza de forma eficiente

Lavar bien la loza Paula



Lavar la loza es el tipo de cosas que todos y todas hacemos, pero que no siempre hacemos bien. Claro, nadie nos enseña a lavar los platos, es algo que se va aprendiendo a medida que vemos a los demás hacerlo, pero pareciera ser bastante básico. Sin embargo, hay algunos trucos para que el lavado sea más eficiente.

Si por lo general evitas ser la persona a cargo del lavado de la loza en tu casa, quizás tengas que replantear tu postura, pues un estudio de la Universidad de Florida publicado en 2014, concluyó que lavar la loza es efectivo para liberar el estrés.

Según descubrieron, cuando una persona se concentra en la acción de lavar, en oler el jabón, en sentir el agua y tocar los platos, su inspiración aumenta en un 25% y su nerviosismo disminuye en un 27%. Así que ya sabes, no solo tienes que lavar, intenta disfrutar el momento.

¿Por dónde empezar?

Empieza lavando la loza menos sucia”, recomienda Gabriela Mardones, Coordinadora de desarrollo de productos en Unilever. Y agrega: “Si la suciedad está muy pegada, se recomienda primero remojar y luego lavar usando el lado de la esponja que por lo general es verde”.

La temperatura del agua

“Para conseguir un correcto lavado, lo recomendado es usar agua tibia o caliente. De esta forma, se conseguirá quitar de manera más rápida la grasa y las manchas”, recomienda Kelly Liang, Brand Manager de Fuzol. “Que el agua tenga una temperatura elevada hará que se evapore y se seque más rápido”.

Lavado de mamaderas

Las mamaderas de los niños suelen acumular suciedad en su interior, muchas veces difícil de sacar. “Puedes lavarlas dejando actuar el lava lozas por cinco minutos y luego enjuagar con mucho cuidado, asegurando que no queden restos del producto en el interior”, recomienda Gabriela Mardones.

Cantidad de lava lozas

Liang recomienda usar una cantidad pequeña, equivalente al tamaño de un fruto seco. “De esta manera, además de hacer rendir el producto, se conseguirá la cantidad recomendada de espuma y por ende, un mejor resultado de lavado”, explica.

No gastes agua de más

Algo que se debería evitar a toda costa es desperdiciar agua mientras se lava. Para esto, Liang recomienda poner un tapón en el lavaplatos y dejar remojando una cantidad considerable de loza para sacar la mugre más superficial.

“Posteriormente debemos calentar el agua, incluir la medida de lava loza adecuada en la esponja y conseguir espuma”, dice. Y agrega: “quitamos la suciedad de cada plato, cubierto e implemento de cocina y cuando tengamos todo limpio e impregnado con el producto, dejamos correr el agua y enjuagamos rápidamente”.

¿Cada cuánto se cambian las esponjas?

En lo posible una vez por semana, recomienda Mardones. “También hay que cambiar regularmente las tablas para picar que estén muy desgastadas y con grietas, así como los rayadores y abridores de lata”.

Usted no lo haga

  • Usar más lava lozas que la medida adecuada, pues su uso excesivo lo lleva a perder sus características y termina rindiendo menos.
  • Usar un paño de cocina en vez de la esponja, pues no cuentan con capacidad de absorción.
  • Secar la loza con paños, pues afecta el resultado final al dejar pelusas y partículas de suciedad. Mejor deja secar al aire.
  • Mezclar lava lozas con cloro u otros productos, porque disminuye su desempeño. Además, Gabriela Mardones es enfática en que algunas mezclas pueden dañar la piel, la garganta, los ojos y las vías respiratorias.

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