Cómo serás a los setenta

como seras a los 60

Llegar bien a los 70 años tiene más que ver con los hábitos y actitudes que con los genes. Es un camino que se empieza a preparar cuando aún se es joven. Este test, basado en las 9 claves para una vejez feliz, arroja pistas sobre el futuro que cada persona se está construyendo, de modo de corregir el rumbo cuando todavía es tiempo.




Paula 1128. Sábado 17 de agosto de 2013.

14 PREGUNTAS PARA DESCUBRIR

LA VIDA QUE LLEVAS HOY, ADÓNDE TE LLEVA.

1) Hoy, que eres adulta, ¿cómo te imaginas que serás a los 70 años?

a) Las mujeres de mi familia son muy longevas así es que me imagino que seré como mi abuela que anda por los 100 años.

b) Me imagino tejiendo junto a una chimenea, rodeada de nietos.

c) Me veo activa y feliz, participando en cursos y aprovechando las promociones del adulto mayor para ir a exposiciones y viajes.

d) No me imagino, me aterra envejecer. Prefiero morirme antes.

2) ¿Qué piensas sobre el hábito de fumar?

a) Fumo y no me interesa dejarlo. De algo hay que morirse.

b) Pienso seguir fumando tranquilamente hasta que cumpla 60 años y ahí lo dejaré.

c) Me restrinjo a solo uno o dos cigarrillos al día. Aunque cuando converso con mis amigas, sin darme cuenta me fumo la cajetilla completa.

d) No me interesa, nunca he fumado.

3) ¿Qué pasa cuando te inscribes en un gimnasio?

a) Empiezo súper entusiasmada, pero al mes lo abandono.

b) Reorganizo todo mi horario y voy sagradamente tres o cuatro veces por semana. Tiene que ocurrir algo muy grave para que me pierda una clase.

c) Empiezo yendo varias veces a la semana, pero, con el paso de los meses, pierdo la constancia y voy una vez a la semana o semana por medio.

d) No me inscribiría en un gimnasio, prefiero quedarme en mi casa.

4) ¿Cuándo vas al doctor?

a) Solo voy cuando tengo alguna urgencia médica.

b) Tengo un médico de cabecera con el que me hago los chequeos que correspondan una vez al año.

c) Al único médico al que consulto una vez al año es al ginecólogo.

d) Voy al médico varias veces al año. Me angustia enfermarme.

5) ¿Qué te gusta beber?

a) Tomo muchas bebidas light, o varias tazas de café durante el día, me mantienen energizada.

b) Agua. Soy de esas personas que andan siempre rellenando una botella con agua de la llave.

c) Me encanta tomar una copa de vino en las comidas. Solo una al día.

d) Tomo vino con la comida, casi siempre dos o tres copas.

6) Si me despiden de mi trabajo reacciono así:

a) Me deprimo, me siento una fracasada y lo veo todo negro.

b) Me siento golpeada y triste, pero confío en que será una situación que durará muy poco y podré salir adelante pronto.

c) Me invade la ansiedad y comienzo a buscar otro trabajo inmediatamente, no importa cuál sea. Me siento como león enjaulado en mi casa.

d) Pienso en cuáles son mis opciones y comienzo a llamar a mis redes sociales para abrir oportunidades.

La esperanza de vida en chile es de 82 años para las mujeres y de 76 para los hombres. Las chilenas además lideran la proyección de expectativa de vida post jubilación de la OCDE a 2050, que proyecta 28 años de vida tras pensionarse. Solo Luxemburgo y Francia superan ese nivel.

7) ¿Cómo te alimentas?

a) Tiendo a comer chocolates, snacks y frituras, sobre todo si ando apurada y con poco tiempo para sentarme a comer.

b) La comida es un tema para mí. Tengo sobrepeso.

c) Me esfuerzo en comer sano y moderado: guisos, legumbres, verduras, carnes magras. Solo de vez en cuando me doy el gusto con un asado o un postre exquisito.

d) Con marraqueta al desayuno, un almuerzo liviano y una comida abundante y casera, porque llego muerta de hambre en la noche.

8) ¿Cuántas frutas y verduras comes al día?

a) Tres o cuatro porciones al día. Me encantan.

b) Me esfuerzo por comer una fruta y una ensalada al día.

c) Cada dos o tres días me acuerdo de comer una ensalada. No me atrae mucho lo verde en realidad.

d) En vez de fruta como postres dulces, por ejemplo un helado.

9 ¿Cuándo ves a tus amigos?

a) Solo para los cumpleaños.

b) Cada dos meses. Pero siempre estamos en contacto por teléfono, whatsapp o mail.

c) El trabajo y los hijos me tienen absorbida, por lo que me he distanciado mucho de mis antiguos amigos.

d) Tengo distintos grupos de amigos y por eso todas las semanas me junto con alguno de ellos. Compartir con mis amigos es muy importante para mí.

10) En tu vida de pareja, ¿qué hacen los fines de semana?

a) Mi pareja siempre organiza los panoramas y yo lo sigo.

b) Me da lata cuando mi pareja me dice que salgamos. Prefiero quedarme en la casa.

c) Me encanta que mi pareja me invite a hacer algo nuevo.

d) Los panoramas a veces los propongo yo y otras, mi pareja.

11) En esta situación qué haces: vas sola en un avión y tu vecino de asiento te mira y dice "hola".

a) Saludo de vuelta y luego evito todo contacto visual y me hago la dormida si es necesario, para no conversar.

b) Saludo y, cuando sirven la cena, converso un poco con mi vecino.

c) Saludo e inicio una conversación, sobre todo si se trata de alguien muy distinto a mí, como un extranjero o una monja, de manera de curiosear otros mundos.

d) Si se trata de una persona de un estrato social o cultural similar al mío, tendremos temas en común para conversar. Si no es así, probablemente me sienta incómoda.

12) ¿Qué actividad física practicas? (Elige una o más)

a) Durante el día hago caminatas y elijo subir escaleras en vez de tomar el ascensor.

b) Hago pilates, yoga o baile una o dos veces por semana.

c) Salgo a trotar o correr regularmente. Me encanta.

d) Me da una lata atroz hacer ejercicios. Soy asumidamente sedentaria.

13) ¿Cómo ahorras para tu vejez?

a) Cotizo por el mínimo obligatorio en una AFP.

b) No cotizo en AFP,  porque con los gastos de mi familia, no me alcanza para ahorrar. Prefiero seguir trabajando hasta que me muera.

c) Ahorro el monto obligatorio en una AFP y, además, lo complemento con una cuenta de ahorro voluntario como una APV o con un seguro.

d) Ahorro en una AFP y, además, planeo invertir, o ya lo hice, en propiedades.

14) ¿Te dejas tiempo para algún hobby que te guste?

a) Sí, todos los años tomo algún curso o taller nuevo. Disfruto aprendiendo.

b) Al menos una vez a la semana dedico un momento para mis pasatiempos.

c)  No tengo tiempo. Mi trabajo y mi familia me consumen todo.

d) Tengo algunos pasatiempos que me encantan, pero me cuesta ser constante. En vacaciones es cuando más lo retomo.

PUNTAJE

Suma el total de puntos y luego revisa abajo tus resultados.

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RESULTADOS DEL TEST

Entre 24 a 28 puntos. Altamente predispuesta a una vejez saludable. Felicitaciones, porque vas encaminada a ser una mujer sana y activa a los 70 años. Mantienes una buena salud física, sociabilidad, y desarrollas una actitud positiva y de optimismo ante la vida. Asumes responsablemente el desafío económico que conlleva la adultez. Sigue así porque, a menos que te atropelle un auto, vivirás 100 años.

Entre 21 a 23 puntos. Medianamente predispuesta a una vejez saludable. Existe cierto descuido en el desarrollo integral de tu persona. Toma conciencia de qué área estás descuidando: ¿lo físico? ¿lo social? ¿tu actitud ante la vida? ¿lo económico?

Entre 16 a 20 puntos. Con desafíos importantes para tener una vejez saludable. Hay ámbitos que están certeramente descuidados, y que predicen una deficitaria calidad de vida en la vejez si es que no los mejoras.

Menos de 15 puntos. Por favor, ¡necesitas un cambio urgente en tu estilo de vida! Tú te mereces una buena calidad de vida desde hoy y tú eres el gestor de ello. ¿Deseas ser feliz en tu vejez? Gandhi decía: "Habita hoy lo que deseas". Hoy es el momento.

*Test desarrollado por la sicóloga UC Jessica Riberi, especialista en PNL, hipnosis, terapia del self  y constelaciones familiares, directora de la Sociedad de Trainer y coach en PNL, Gestor-Chile. www.gestorpnl.cl

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LAS 9 CLAVES PARA UNA VEJEZ FELIZ

No es una cuestión de suerte llegar a los 70 de forma activa, sana y participativa, y conseguir que esto se mantenga cuando se cumple 80. Según los especialistas consultados para este reportaje, la calidad de vida que uno tendrá en su vejez está determinada solo 20% por los genes y 80% por tener hábitos saludables y las actitudes y estilos de vida.

50% de las mujeres en Chile muere por afecciones cardiacas y 7% por cáncer de mama. Por eso, además de sus controles ginecológicos, las mujeres deben   examinarse la presión arterial, el colesterol y perfil lipídico.

1- CONTROLES MÉDICOS: aunque el cáncer de mamas es la enfermedad que más temen contraer las chilenas (58,7%, según una encuesta de 2011 del CEOC de la U. de Talca), la principal causa de muerte en mujeres es, lejos, las afecciones cardiacas: 50% de las chilenas muere por esta causa. "El problema es que en Chile el médico de cabecera de las mujeres es el ginecólogo, que les cuida el sistema reproductivo, las mamas y los huesos, pero se terminan muriendo de infartos porque nadie les cuidó las arterias", dice el geriatra Juan Carlos Molina. Las mujeres a partir de los 30 años deberían examinarse la presión arterial, el colesterol y perfil lipídico, de la misma manera que se hacen el pap o la mamografía cada 5 años si es que los exámenes salen normales. Si alguno sale alterado, se recomienda hacerlos una vez al año. En caso de mujeres fumadoras, esos chequeos deben comenzar a los 25 años. Aunque en edad fértil las mujeres tienen un riesgo cardiovascular menor (por la protección que reciben de los estrógenos), en mujeres fumadoras el daño en las arterias comienza desde más joven, lo que hace más importante hacerse estos exámenes preventivos. Las mujeres que tengan familiares que han muerto de enfermedades como cáncer, diabetes o infartos, deben contar estos antecedentes a su médico, ser constantes con sus exámenes de detección cada uno o dos años y cuidar sus factores de riesgo.

El estudio Aging well (2003) de la universidad de Harvard hizo un seguimiento a 824 hombres y mujeres desde los 18 hasta pasados los 80 años. Los que tenían una vida longeva y feliz compartían las siguientes características: resilIencia y adaptabilidad, una red fuerte de amigos y familia, motivación por aprender. Eso, acompañado de hábitos sanos, como buena alimentación, ejercicios y no fumar.

2- DEJAR DE FUMAR: esta es una de las cuatro medidas principales para un envejecimiento saludable en las mujeres recomendada por la OMS y el Instituto Norteamericano de Envejecimiento. Chile tiene una de las tasas de tabaquismo en mujeres más altas del mundo, con 43%. El principal problema de fumar tanto y desde tan joven, es que el daño en las arterias, los pulmones y el cerebro empieza mucho antes. Si, además, el cigarrillo se combina con el uso de anticonceptivos, es mayor la posibilidad de formar tromboembolismo pulmonar y trombosis en las piernas, sin importar la edad. Dejar de fumar es beneficioso a cualquier edad y en solo meses mejorará la capacidad respiratoria, la calidad de la piel, la presión arterial y, al año, el riesgo cardiovascular se reducirá en 50%. Sin embargo, para efectos de longevidad y calidad de vida es mejor fumar el último cigarrillo antes de los 40 años si se quiere lograr la misma expectativa de vida que una persona no fumadora, porque los pulmones tardan una década y media en limpiarse y con la edad se va haciendo más difícil revertir el daño ya hecho sobre el organismo.

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43% de las chilenas fuma, lo que nos convierte en el país con una de las tasas de tabaquismo en mujeres más altas del mundo. En Chile mueren 46 personas al día por el cigarrillo, 65% de ellas por patología cardiovascular, y 21% por cáncer al pulmón.

3- SOLO UNA COPA DE VINO TINTO: en términos generales, los médicos recomiendan evitar el alcohol. Para las mujeres solo es beneficioso si se toma una copa de vino tinto al día, por los antioxidantes que aporta. Solo una, porque tomar dos copas ya pasa a ser dañino para la presión arterial y el hígado, entre otras cosas.

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Una copa de vino tinto al día junto con la comida es un factor protector de la salud para las mujeres. Solo una copa. Pasarse de esa medida y tomar dos ya pasa a ser perjudicial para la presión arterial y puede dañar las neuronas y órganos vitales en el largo plazo.

4- DIETA MEDITERRÁNEA Y TOMAR AGUA: en esto hay consenso entre especialistas consultados: la dieta mediterránea es la que comprobadamente mejora la longevidad y la calidad de vida. Está basada, básicamente, en el consumo de frutas y verduras de la temporada, legumbres, alimentos integrales, cereales, aceite de oliva, carnes blancas como pavo o pescado, poca sal y poca azúcar. El consumo elevado diario de frutas y verduras reduce 30% el riesgo de mortalidad por cáncer, enfermedades cardiovasculares, diabetes u obesidad, según un estudio del Instituto Catalán de Oncología, que se realizó en 41 mil hombres y mujeres españoles durante diez años. Para lograr este efecto protector, lo mínimo recomendable sería comer un plato de verduras y dos frutas al día. El consumo de calcio también es importante para cuidar la salud de los huesos, especialmente en las mujeres. El geriatra de la UC Pedro Paulo Marín recomienda consumir dos porciones diarias de lácteos, como leche descremada, yogurt light o quesillo y, a partir de los 45 años, consultar con el médico la necesidad de suplementos de calcio. Junto a la alimentación, es vital una buena ingesta de agua. El agua participa en la regulación de la temperatura del cuerpo, lubrica articulaciones, facilita la eliminación de toxinas y limpia la piel. La clásica recomendación de dos litros al día sigue vigente.

El ejercicio aeróbico moderado libera una sustancia llamada factor neurotóxico cerebral. se trata de un estimulante de la conexión neuronal que ayuda a prevenir demencias y deterioro mental. También contribuye a prevenir diabetes e hipertensión.

5- ACTIVIDAD FÍSICA DIARIA: 70% de los chilenos son sedentarios y de los adultos mayores, 90%. Nunca es tarde para empezar a ser una persona activa, pero antes de los 40 o 45 años es mucho más efectivo para evitar la pérdida de masa muscular. A todas las edades las mujeres deberían hacer al menos 40 minutos de ejercicios 5 veces por semana, para desarrollar una musculatura fuerte y huesos resistentes hasta edades avanzadas. Es la mejor manera de prevenir caídas y fracturas, que es una de las principales causas de invalidez en las mujeres mayores de 70 años. El doctor Juan Carlos Molina explica que se debe combinar ejercicios de flexibilidad (yoga, pilates), equilibrio (tai chi, baile), aeróbico (caminar, trotar, bicicleta), fuerza y resistencia (levantar pesos, subir escaleras, subir cerros). La actividad física, además, tiene otros beneficios: el ejercicio rítmico, como trotar y  bailar, es antidepresivo, porque libera serotonina. El ejercicio aeróbico moderado libera una sustancia llamada factor neurotóxico cerebral, que es un estimulante de la conexión neuronal que ayuda a prevenir demencias y deterioro mental. También ayuda a prevenir la diabetes e hipertensión. Lo bueno es que todos estos efectos son acumulativos durante el día: uno puede juntar 15 minutos de caminata en una mañana con media hora de yoga en la tarde.

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6- UNA ACTITUD DE CURIOSIDAD Y APRENDIZAJE PERMANENTE: esto implica, durante toda la vida, seguir estudiando, haciendo cursos, talleres, aprender idiomas, ir a exposiciones o actividades culturales, cultivar otros intereses y habilidades, aparte de la dedicación a la familia y el trabajo. Esta disposición ayuda a mantenerse activa y feliz después de jubilar, y estimula el uso de otras conexiones cerebrales, además de las que las mujeres adultas ocupan siempre y repetitivamente en el trabajo y la crianza. Mantener un espíritu curioso es rejuvenecedor. "Una persona que asuma su vida desde una actitud creativa y de ser un eterno aprendiz, genera vitalidad y entusiasmo en el día a día. Le permite mantener la conexión social con nuevas generaciones y personas de distintos intereses, otorgándole la posibilidad de interactuar con personas diversas y, al mismo tiempo, asumir los desafíos que la vida le proporcione", dice la sicóloga Jessica Riberi.

7- CAPACIDAD DE ADAPTACIÓN Y RESILIENCIA: según el estudio Aging well, de la U. de Harvard, las personas que envejecen mejor tienen una actitud positiva ante el futuro, un sentido de confianza y buen humor que les permite adaptarse mejor a los cambios y dificultades de la vida. "En ello juega un rol fundamental ser capaz de reflexionar sobre los hechos que se le presentan en lo cotidiano, matizado por el humor y siempre con una mente ágil y creativa. Son personas muy optimistas que consideran que las situaciones adversas van a durar poco y tienen la esperanza de salir adelante en menos tiempo", dice la doctora Riberi.

¿Por qué las mujeres tienen pensiones más bajas que los hombres? Según estudios de la superintendencia de valores y seguros, las mujeres pueden vivir hasta los 89,3 años y los hombres hasta los 84,5. A eso se suma que las mujeres se jubilan 5 años antes y ganan salarios más bajos.

8- RELACIONES SOCIALES FUERTES:  las personas que comparten con frecuencia con su familia, que cuidan sus amistades y las ven frecuentemente, que salen de su casa a encontrarse e involucrarse en actividades con otros y tienen una red social fuerte con la que sienten apoyo y cercanía, envejecen mejor y más felices. El sentido de pertenencia, no solo a la familia o a la pareja, sino también a grupos de amigos antiguos y nuevos, a organizaciones como un partido político, un club deportivo, un grupo espiritual o de voluntariado, es clave. "Sociabilizar y sentirse parte de algo es muy importante y un factor protector en la vejez. Lo peor es quedarse aislado en la casa e inactivo. En general, las mujeres tienen más capacidad de hacer amistades nuevas que los hombres", dice el geriatra Juan Carlos Molina.

9- AHORRAR PARA UNA BUENA SITUACIÓN ECONÓMICA: disponer de ingresos económicos es una de las preocupaciones que más mencionan las personas de edad en Chile y el mundo, y es clave para la calidad de vida. Según estudios de la Superintendencia de Valores y Seguros, las mujeres pueden llegar a vivir hasta los 89,3 años y los hombres hasta los 84,5, lo que es considerado para el cálculo de pensión y por eso nuestros montos son más bajos. Si a eso sumamos que la mujer se jubila cinco años antes que el hombre y su nivel de remuneración es estadísticamente inferior, todo eso incide en que sus pensiones van a ser más bajas y, por lo tanto, deba redoblar sus esfuerzos de ahorro para asegurar una vejez económicamente tranquila. Según cálculos del Centro Cieddes (Corporación de Investigación, Estudio y Desarrollo de la Seguridad Social), una mujer que jubila a la edad legal de 60 años –suponiendo que tenga un cónyuge 2 años mayor–,  para obtener una pensión de $ 500.000 necesita acumular un total de $ 116 millones en su cuenta de AFP. Si quiere una pensión de $ 700.000, tendría que lograr un monto de $ 163 millones. Y si desea una pensión mensual de $ 1 millón, debe acumular $ 233 millones. En cambio, un hombre necesita considerablemente menos –186 millones–, si quiere lograr una pensión de $ 1 millón. Una mujer joven debe cotizar sí o sí en una AFP y, además, complementar con otras herramientas de ahorro, como una APV, un fondo mutuo o un bien raíz. De hecho, cerca de 40% del saldo final de la cuenta se habrá construido con los aportes efectuados en los primeros años de vida laboral. Es recomendable que cada mujer analice con su asesor previsional cuál es la pensión que desea obtener y, a partir de allí, elabore su propio plan de ahorro. "Para lograrlo, es necesario invertir el comportamiento habitual frente al ahorro. Si en general uno dice: 'Ingreso menos gastos = disponible para ahorro', nunca quedará un saldo disponible para ahorrar. Lo que se debe hacer es decir: 'Ingresos menos ahorro = disponible para gasto', poniendo el ahorro en una posición inicial, de carácter obligado", dice Manuel Herrera, jefe de educación previsional del Centro Cieddes.

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$ 233 millones de pesos debe acumular en su cuenta de AFP una mujer casada si quiere jubilar a los 60 años con una pensión de 1 millón de pesos.

* Fuentes consultadas: doctor Pedro Paulo Marín, director del Centro de Geriatría UC; doctor Juan Carlos Molina, geriatra especialista en envejecimiento activo; doctor Patricio Fuentes, neurólogo de la U. de Chile; Jessica Riberi, sicóloga UC y máster en PNL; y Manuel Molina, jefe de educación previsional del Centro Cieddes.

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