El argentino sorprendió con una propuesta de vestidos, polleras largas y trajes de sastrería femenina. Con 20 looks en la pasarela, una imponente música de fondo de la ópera Carmen, fuente de inspiración de su colección, y un público que lo aplaudió de pie sorprendido por su puesta en escena, Ramírez demostró por qué es uno de los mejores diseñadores latinoamericanos de la actualidad.