Paula 1184. Sábado 10 de octubre de 2015.
La nueva tendencia gastronómica de tomar desayuno a la cena hace furor en redes sociales con imágenes de suculentos panqueques, huevos revueltos y tostadas que se comen de noche. Una versión renovada de las clásicas once-comidas.
Ya es casi una costumbre hipster: adueñarse de objetos o costumbres del pasado para volverlas tendencia. Pasó con los tornamesas, la barba tupida, las zapatillas New Balance –que más de un sesentón todavía guarda en su clóset– y hasta con el ponche. De igual manera, en el mundillo foodie se ponen de moda ciertos productos o formas de comer que, a veces, no tienen mucho de nuevo más que el nombre. Quizás sea el caso del brinner, breakfast for dinner (o "desayuno a la cena"), el nuevo hit gastronómico que es trending topic en redes sociales –Pinterest tiene tableros dedicados exclusivamente a éste, y enInstagram el hashtag #breakfastfordinner cosecha más de 207.000 publicaciones– y que amenaza con destronar al afamado brunch, pero que en Chile se parece demasiado a algo que existe desde tiempos inmemorables: la once-comida.
Breakfast for dinner
En marzo de 2016 se publica este libro, de Carol Hilker, que compila exclusivamente recetas para el brinner. US$ 21.95 más envío en Amazon.com.
La diferencia parece tener más que ver con los ingredientes. Según el libro Breakfast for dinner de Lindsay Landis, los básicos de esta comida son: huevos, manteca, tocino, leche, harina, aceite de oliva, sal, frutas y verduras. La once-comida, por su parte, consta habitualmente de panes, mantequilla, mermeladas, palta y tortas dulces. "El brinner chileno, que es la once-comida, surgió principalmente por la falta de tiempo. Pero no lo tomamos de la misma forma que los gringos: no comemos huevos con tocino", dice la nutricionista de la Universidad de Chile Carola Wittwer. En efecto, la tendencia que surgió en Estados Unidos –donde en marzo Mc Donald's anunció que en algunos locales ofrecerían desayunos durante todo el día– no destaca las propiedades más nutritivas del desayuno (supuestamente, la comida más importante del día), sino preparaciones como waffles, panqueques con crema y sirope, huevos fritos con tocino, french toast o cereales con leche. Pero tampoco la versión chilena es tan sana: "En Chile un 70% de la población es gorda y ese porcentaje coincide con el que come once-comida y no cena, algo que antiguamente sí se hacía," dice Wittwer (según la Encuesta Nacional de Consumo Alimentario de 2014, el 80% de la población toma la once mientras que solo el 27% come de noche). La nutricionista asegura que lo más sano es respetar las cuatro comidas del día, pero, para sumarse a la tendencia del brinner con cautela, sugiere evitar los dulces y grasas y en cambio usar ingredientes saludables: pebre, huevo duro o a la copa, porotos negros, ricota, palta. "Una alternativa para el huevo es revolverlo en leche para que no quede frito, ¡nadie se dará cuenta en la casa que no usaste aceite!".
En Tea Connection se puede ordenar de la carta de desayuno hasta las 20 horas. El Club Salmón ($6.800, en la foto) y el yogurt con granola, miel y frutas /$4.900) son dos imperdibles. Av Pedro de Valdivia 0129, Providencia. Fono 22234 0047.