El paisajismo sonoro de Juana Molina

Paula 1141. Sábado 15 de febrero de 2014.

Puso al Cono Sur en el mapa del pop de avanzada y se posiciona como la artista sudamericana de cabecera para la prensa de habla inglesa. Por segunda vez en Chile -para actuar el sábado 1 de marzo en el Festival Neutral en el GAM-, la cantautora argentina habla aquí sobre su último disco.

Su primera vez en el país fue en septiembre de 2007 y tocó en dos lugares muy disímiles: el entonces pulcro Teatro Oriente y la ecléctica Piedra Feliz de Valparaíso. Aquella vez, en Santiago, lució su ya célebre inseguridad escénica: pidió disculpas por ejecuciones que a cualquier oído eran limpias y precisas, se quejó por un zumbido que nadie más oía y se extrañó cuando el público le pidió una canción de Segundo, su disco del año 2000, el mismo con el que trazó la ruta hacia una música de texturas electroacústicas, envolvente, de loops y ruiditos imperceptibles que configuran un universo entre pastoril y onírico.

"Cada disco, desde Segundo, son distintos momentos de un mismo camino. Es como la Panamericana, que la tomás acá y ¿hasta dónde llega? ¿Hasta Venezuela? Bueno, la tomás y ves ciudad, luego hay campo, en algún momento se pone selvático y vuelve a ser agreste. El camino es el mismo, lo que cambia es el paisaje", dice esta cantautora argentina desde su casa en Villa Pacheco a 50 kilómetros de Buenos Aires, donde vive y graba sus discos.

Los paisajes que viene a presentar al Festival Neutral -donde actuarán también Jorge González, Electrodomésticos, Coiffeur, Congelador y Atom TM, entre otros- corresponden a Wed 21, su sexta entrega, la que sucede a los aclamados Tres cosas (2004), Son (2006) y Un día (2008). "Intenté cambiar mi método de trabajo, no sabría decir cómo, ni si lo logré. Mi idea era salir de la zona de confort donde me hallaba, aunque no sé si trabajando como antes no hubiera llegado al mismo resultado", señala.

El nombre del disco, Wed 21 ¿es por algún miércoles 21 en especial?

El nombre es casual, era una nomenclatura, como si se llamara R2D2. Le puse así a una canción del disco para salvarla en la computadora un día que se cortó la luz. Después mi hija me dijo "ponéle Wed 21 al disco que es re cool".

En la canción Ferocísimo hablas contra el progreso, cosa que ya había en discos anteriores.

Es una contradicción llamarle progreso a una involución tal. La vida moderna tiene cosas buenas, como la medicina o internet, pero se aplica mal al uso doméstico. Me molesta que se asocie la idea de bienestar a tener más cosas, al final soy contraria al consumo.

De hecho, vives lejos de la ciudad...

Yo creo que se podría optar por una vida más tranquila, no tan apabullante. O quizás la equivocada sea yo y a la gente le encante el consumo y sea yo quien esté recluida en mi forma de pensar.