Empezar a pintar

Paula.cl / Fotografía: gentileza Ana María Cruz

14 dic 2017 06:01 PM

Tiempo de lectura: 2 minutos

Una autodidacta y la tienda de manualidades Revesderecho ofrecen un taller para principiantes, inspirado en la técnica del folk-art norteamericano, en el que los asistentes aprenderán a pintar sobre superficies como cerámica, madera, tela y vidrio.

Por Paula.cl / Fotografía: gentileza Ana María Cruz

Paula.cl

De los 30 años que Ana María Cruz (60) lleva dedicada a las manualidades, saca una conclusión: por sobre el bordado, el tejido y el patchwork, que también conoce y enseña, la pintura es lo que le raya. Especialmente cuando se trata de la pintura country, cuya técnica -inspirada en el folk art contemporáneo- se caracteriza por juegos de luces, sombras y esfumados, generalmente en colores más ocre u envejecidos (como rojo óxido, azul jeans, verde musgo o burdeo), terminaciones delineadas y acabados mate.

"Se trata de una instancia personalizada, muy libre y a gusto de cada alumno", asegura Ana María, quien durante los años 2000 y 2012 publicó su trabajo manual en revistas como Paula Práctica y Materia Prima. También ha sido invitada a participar en el programa Plan V (13C), de Virginia Demaria, y ha realizado una serie de cursos y seminarios, en Chile y Estados Unidos, sobre esta técnica, que enseña a través del curso llamado Pintura Trend, de la tienda de manualidades Revesderecho.

Utilizando pintura acrílica al agua, la clase se inicia ejercitando el paso a paso de la técnica sobre papel, utilizando pinceles angulares, liners y secos, entre otros. Luego de practicar libremente, cada alumno elige una superficie, entre cartón, cerámica, madera, vidrio o bizcocho. Una vez seleccionada la plataforma en la que se trabajará, Ana María le entrega, uno por uno, las coordenadas para lijarla y sellarla adecuadamente. Finalmente, inspirados en sus propias búsquedas o creaciones, o en las revistas y álbumes de fotos de pinturas que Ana María lleva a la clase, los alumnos inician un proyecto libre.

"Creo que el gran plus del taller es que al aprender a pintar sobre otras superficies, los alumnos llegan a sus casas a intervenir y reciclar sus propios objetos, como maceteros, teteras, loza", asegura Ana María.