Esto no es una revista, es un negativo
"En el juego que hay entre las tipografías y en cómo se proyectan se nota que soy diseñadora gráfica. Experimenté con el sistema de negativos para que se vieran algunas proyecciones en negro y otras en blanco, hasta que encontré la combinación adecuada", asegura Natalia Brito, autora del trabajo que da inicio a este reportaje (25).
Esto no es una revista, es papel mural
Buscaron colores. Tipografías. Fotos. Cortaron las páginas de Paula en pedazos y las transformaron en papel mural. Luego de observar la pared, Trinidad Lira (28) y Juan Pablo Nazar (30) –socios de DAMAjuana, una marca de accesorios contemporáneos hechos con técnicas artesanales–, decidieron incorporar un armario. "Tiene que ver con la ropa", pensaron. "Y Paula es un revista de moda". De a poco, pegaron los miles de cuadrados de papel en el ropero y en zapatos y camisas. "En DAMAjuana reinventamos las técnicas tradicionales y quisimos hacer lo mismo con el collage", señala Juan Pablo.
Esto no es una revista, es una zapatilla
En las vitrinas de las tiendas Size?, en Londres, uno de los lugares favoritos de los fanáticos de las zapatillas, acompañan sus productos con modelos similares hechos de papel. Los hace el estudiante de Ilustración, David Brownings, con una técnica similar al origami: dobla papeles de colores hasta conseguir que su trabajo se asemeje a los sofisticados modelos de zapatillas de la tienda. Es un ídolo entre los coleccionistas y su obra fue destacada en la revista Print, que publica a los mejores diseñadores contemporáneos. A partir de su trabajo, invitamos a la artista Carolina Kommer (29) a hacer su propia versión con las páginas de Paula.
Esto no es una revista, es un vestido
"Fue muy difícil trabajar con papel. Primero trencé y tejí pedazos gruesos, pero quedaban sin forma. Hice cuadraditos de muestra hasta que encontré el punto y el tejido adecuados. Corté tiras muy delgadas, casi como hilos, y usé palillos circulares. Tejí todo sin ningún corte. En una sola pieza. Lo que tejí con papel no sólo es una prenda de vestir, es también un símbolo que demuestra que es posible reciclar y reutilizar este material en algo concreto, bonito y útil. Creo en el craftivismo, que es activismo a través de las manualidades. Esto, más que ser un hobby, es una manifestación. ¿Para qué comprarme un vestido si lo puedo hacer yo?", Camila Larsen (23), estudiante de Periodismo.
Esto no es una revista, es una camisa y una blusa
Una hoja en blanco fue la inspiración de Karl Lagerfeld para la colección de primavera 2009 de Chanel, que presentó en París en una pasarela decorada con 7.000 flores de papel hechas a mano y espectaculares sombreros del mismo material, diseñados por la estilista japonesa Katsuya Kamo. La escenografía fue construida con 4.000 metros cuadrados de papel y fue clave para que este desfile fuera considerado uno de los mejores del año pasado. Siguiendo esta tendencia, le pedimos a la artista Loreto Slater (25) que realizara ropa de papel, perfecta para enmarcarla y usarla como decoración.
Esto no es una revista, es un mundo infantil
Cuando Adolfo Bravo (27) supo que debía usar Paula como material de trabajo, recordó las largas horas que pasó en su infancia observando las producciones de moda y recortando las fotos para hacer collages. "Para mí Paula significa frescura. Su propuesta visual refresca la vista y el colorido de sus páginas es muy alegre", asegura. Y eso fue lo que este estudiante de Dirección de Arte quiso transmitir con el mundo infantil que construyó a partir de técnicas como collage, origami y papel maché. Así, transformó en realidad su juego de infancia y usó las páginas de la revista para recrear el mundo fantástico que imaginaba cuando niño.
Esto no es una revista, es un cuadro
En sus obras, la artista Amalia Valdés (28) usa papel. Hace algunos años una amiga le ofreció matrices de género estampados, considerados desechos, y decidió usarlos en su trabajo plástico porque es barato y porque es una buena manera de reciclar. El papel material asegura– le permite desarrollar técnicas y texturas, como collage, papel maché o mosaicos. Al recibir Paula, pensó que iba a tener que trabajar sin color. Se imaginó miles de hojas blancas con tipografía negra. Luego de observarla mejor, se dio cuenta de que estaba equivocada. Cortó las páginas en tiritas, las dobló e hizo resortes de diferentes tamaños, como los que hacía cuando era chica. Los pegó en madera. De a poco, Amalia vio cómo desaparecía la revista y aparecía su composición.
Esto no es una revista, es un tejido
"La necesidad puede ser un gran aliado a la hora de crear, porque no tienes todo a tu alcance. En la universidad no tenía plata para materiales, así que comencé a reciclar y trabajé con papel de diario. Con ese material desarrollé la técnica que usé para hacer esta manta, en la que multiplico una trama. Esta repetición tiene que ver con los pequeños ciclos de nuestra vida. Al final, nuestra existencia se construye con la suma de minutos que gastamos en actos cotidianos y repetitivos. Aunque uno sólo se da cuenta cuando ya ha avanzado, la suma de estos módulos tejidos forma un objeto mayor, tal como nosotros, con lo cotidiano, construimos nuestra historia". Francisca Gómez (29), artista y diseñadora de Paula.
Esto no es una revista, son flotadores
"Primero tuve que entender el tamaño de la revista. Saber que cada página mide 27 x 21 cm, que se traduce en 245 centímetros cúbicos de esculturas. Trabajé con los elementos básicos de una revista, el papel y las tonalidades del perfil de impresión CMYK, para hacer algo con volumen. Quise que la forma le ganara a la imagen. La composición refleja la mecanización del trabajo de doblar el papel. Estas figuras pueden flotar. Puestas en el suelo no se aprecian sus características volumétricas, pero cuando son activadas en agua vuelven a tener volumen y recuperan su sentido: ser flotadores". Francisca Sánchez (34), artista y antropóloga.
Esto no es una revista, es una escultura
Sin pegamento. Sin tijeras. Sólo con tres ejemplares de Paula. Doblando cada página hasta conseguir figuras geométricas que se sostienen solas, la diseñadora Solange Heilenkötter (46) hizo una escultura colgante de más de un metro y medio de altura. Inspirada en las lámparas y figuras que realiza con polipropileno, un material plástico durable y resistente al agua –visiblemente similar al papel por su color y textura– Solange usó el número aniversario de Paula como un objeto en sí mismo. "No quise intervenir la revista, sino entenderla como un todo. El material me dio la forma y terminó siendo una escultura que, como mi trabajo, se basa en principios geométricos", describe.
Esto no es una revista, es un cotillón de cumpleaños
Según el Worldwatch Institute, n un año consumir papel reciclado reduce en un 74% la contaminación ambiental y en un 35% los desechos que llegarían al mar si se produjera papel virgen. Aún así, desde 1921, en el mundo el consumo sólo ha aumentado en un 18%. Sabiendo estos datos, ¿por qué no reciclar y reducir la contaminación? Para comenzar a reutilizar este material, la diseñadora Silvia Caracuel (22) propone convertir las páginas de Paula en un cotillón, con trompetas, sombreros y una torta, especiales para decorar una fiesta infantil.
Esto no es una revista, es una ciudad
Similar al trabajo que actualmente expone en la galería Isabel Aninat –una ciudad en miniatura de 20 metros cuadrados hecha con cartón que realizó en conjunto con Trinidad Pacheco– la artista María Feuereisen (24) creó pequeñas edificaciones con las páginas de Paula. Caminos, puentes y casas de papel. Su propuesta se enmarca dentro de un nuevo fenómeno: el boom de réplicas y modelos arquitectónicos a pequeña escala hechos con este material. Uno de los mejores exponentes de este arte es el japonés Wataru Itou, un estudiante de Diseño que durante cuatro años dobló y cortó hojas blancas para hacer un espectacular castillo, que está expuesto en la isla artificial Umihotaru, en la Tokyo Bay Aqua- line. Su modelo tiene iluminación y un tren que se mueve. Todo 100% papel.
Esto no es una revista, es un bosque
El ilustrador y director de arte Gabriel Ebensperger (26), cuyos dibujos son publicados en Paula bajo el seudónimo Ninion, utilizó la revista como un material de construcción.
¿Habías trabajado con papel? ¿Cómo te enfrentaste a este material?
Mis últimas ilustraciones han incorporado fondos y formas de papel. El material lo tomé con mucho cuidado y respeto, porque resultó ser un papel couché bastante traicionero y poco dócil.
¿En qué te enfocaste para trabajar?
Primero seleccioné las partes que me servían o gustaban y armé una paleta cromática. Colores planos, texturas. Luego dibujé un boceto de lo que el material me inspiraba. Más que un pegoteo de superficies, se transformó en una construcción volumétrica, con profundidades e ilusiones ópticas.
¿Cómo fue el desafío de trabajar con la revista?
Interesante desde el punto de vista de no elegir la materialidad. El papel de la revista determinó el modo de trabajo y la forma de conseguir lo que quería hacer.
Esto no es una revista, es una composición geométrica
Papel de diario o guías de teléfono: en cada uno de sus trabajos el artista Andrés Vio (36) transforma desechos en obrasde arte. Desarma y vuelve a armar. A partir de diferentes módulos, Vio generó con la revista una cantidad infinita de combinaciones geométricas. Un triángulo. Un rombo. Una figura rectangular con dos puntas. Una secuencia de figuras que, juntas o separadas, tienen sentido. "Entendí Paula como un objeto que se puede deconstruir, ya que el concepto es similar a cómo uno lee: cada persona la ojea de distinta manera, tal como se crean diferentes composiciones con estas figuras", sostiene.
Esto no es una revista, es una repisa
Hoy, los diseñadores industriales consideran el papel un material de trabajo. Construyen sillas, mesas y lámparas para crear objetos utilizables, no puramente decorativos. Es el caso de Ryuji Nakamura Architects, una firma japonesa ganadora de más de diez premios de diseño internacional que crea sillas y esculturas de papel blanco. Sava Kusanovic (22), estudiante de Diseño de la UDP, usó Paula como materia prima y creó un objeto para la mujer. "Quise mantener el formato y trabajar con la idea de que cada sección está enfocada en los distintos intereses de las mujeres. En Paula hay moda, belleza, panoramas y reportajes, y los diferentes niveles de la repisa representan la diversidad de contenidos", señala.
Esto no es una revista, es arte moderno
En 2009, en el MOMA se expuso Paper: Pressed, Stained, Slashed, Fold (Papel: prensado, teñido, cortado, doblado), con obras de artistas como Ellen Gallagher y Martin Creed. El trabajo de Verónica Silva (29) se inscribe en esta tendencia: a partir de la técnica china del kirigami –el arte de cortar papel– realizó una obra de estética pop, que replica la imagen de una mujer y que encima tiene, invertida, su figura recortada.