La metáfora del mar y las olas no son nuevas en la lucha de los derechos de la mujer. En la genealogía del feminismo, se habla de "primera ola" para denominar la primera fase surgida a mediados del siglo XVIII que buscaba conseguir el derecho a propiedad y otras demandas en la asimetría de la mujer con respecto al hombre. Para algunas, actualmente estamos en la etapa final de la tercera ola y, para otras, ya entramos de lleno a la cuarta ola del movimiento.
Lo cierto es que la multitud a la que convocan las marchas se le suele comparar con una marea, debido a la fuerza, impacto y magnitud con la que las mujeres unidas podemos hacernos ver, escuchar y exigir. En esta lógica, una no es ninguna y juntas somos más. Por eso el Oráculo de esta semana nos ha señalado a todas y a cada una de nosotras como protagonistas del presente y del porvenir.
La luna nueva en Piscis, que remueve recuerdos y nostalgias, nos hace entrar renovadas a la acción que requieren los tiempos de cambio. Y esta nueva madurez emocional con la que empezamos en marzo es colectiva. Nuestro fortalecimiento personal es el robustecimiento de todas. Por eso el llamado es a ser conscientes de que cada decisión que tomemos no es solo para el beneficio individual, sino que también de las demás.
Hazte presente: en las manifestaciones feministas desde el lugar de donde creas que puedes aportar, aunque no sea necesariamente el más cómodo. A veces los sacrificios son necesarios.
Eleva la voz: para hacerte escuchar. Muchas veces para ocupar el espacio que merecemos vamos a tener que repetir claramente lo que necesitamos.
Escucha a tus pares: y considera sus puntos de vistas. Todas las opiniones valen.
Color de la suerte: morado.