Maternidad y Sertralina: una tendencia al alza
El uso de medicamentos antidepresivos se han hecho cada vez más frecuentes en mujeres en edad reproductiva, sobre todo después de la pandemia, indican los especialistas.
“Soy amiga de varias de las mamás de los cursos de mis cuatro hijos, y son muchas, muchísimas, las que tomamos Sertralina o equivalentes. Para nadie es un secreto”, dice Josefina.
“¿Setralina? ¿Se puede sobrevivir sin ella?”, pregunta Natalia, quien reconoce que lleva al menos tres años tomando el medicamento. Lo hace desde que nació su primera hija.
“A mí me lo recetó mi psiquiatra en 2016, cuando tuve a mi primer hijo. Cuando mi guagua tenía cinco días y era mi segundo día en la casa, me bajó una angustia terrible. No podía cerrar los ojos, tenía el pecho apretado, apenas podía respirar. No paraba de mirarla, era como un cuidado intensivo que no me dejaba tranquila, estaba muy angustiada. Mi ginecólogo me había dado un Ravotril en la clínica para que pudiera dormir, y después me dio Sulpilan, que se supone ayuda a relajarte y a que salga más leche, pero sentía que no era suficiente. Con mi marido llamamos a mi matrona y me dijo que el ginecólogo ya no podría ayudarme, debía ir a un psiquiatra. Él me recetó Sertralina, y me ayudó muchísimo. Han pasado casi nueve años desde entonces, y nunca más la he dejado. A veces bajo la dosis, a veces la subo, siempre según lo que me diga mi psiquiatra, pero siempre la he tomado”, comenta Carolina.
Como Josefina, Natalia y Carolina, hoy hay muchas mujeres –sobre todo aquellas en etapa de crianza de niños chicos– que han hecho que el uso de antidepresivos como la Sertralina –o cualquiera de sus equivalentes– vaya al alza.
Perteneciente a la familia de los inhibidores selectivos de recaptación de serotonina, o ISRS –que además de la Sertralina incluye otros medicamentos como el Citalopram, Escitalopram, Fluoxetina y Paroxetina–, sirven para distintas cosas. Francisca Decebal-Cuza, doctora psiquiatra perinatal y académica de la Escuela de Obstetricia y Puericultura de la Universidad Los Andes, explica que, por una parte, tienen un efecto antidepresivo, por lo que se pueden usar para tratar la depresión. Sin embargo, señala que también tienen un efecto ansiolítico, por lo que se indican también para otro tipo de trastornos, como las crisis de pánico, algunos tipos de fobia –como la social–, y trastornos de ansiedad generalizada, entre otros. Además, el uso de Sertralina o equivalentes se usa también en condiciones como el trastorno disfórico premenstrual o en algunos trastornos obsesivos. “Pese a que pertenece a la familia de los antidepresivos, se podría decir que el nombre está un poco mal puesto, porque el efecto no se limita solo a un antidepresivo”, aclara la profesional.
Natalia Bruna, psicóloga perinatal y de crianza, explica que este tipo de remedios actúa aumentando el nivel de serotonina, lo que ayuda a estabilizar el ánimo y a controlar las emociones.
Uso cada vez más frecuente
Asumir la maternidad como un período bonito, pero también desafiante y difícil, es cada vez más común. Para nadie es un secreto que las mujeres en la actualidad están cada vez más exigidas, y ya no solo sienten el peso y deber de ser buenas madres, sino también buenas profesionales, esposas, amigas, hijas, y mujeres en general. Todo en un contexto de vidas más agitadas, con menos redes de apoyo, y mayor necesidad de trabajar para mantener a sus familias dado el aumento del costo de vida.
Si bien hoy las redes sociales muestran a miles de madres perfectas y llenas de recetas para hacerlo bien, también muestran cada vez más aquellas que no esconden sus vulnerabilidades. Aquello que hace algunos años nadie nombraba y era considerado un tema tabú, como la depresión posparto, hoy cada vez va tomando más relevancia en el debate público, dada su fuerte prevalencia.
“Efectivamente parece ser que esto es una tendencia al alza en los últimos años”, dice la doctora Decebal-Cuza respecto al aumento del uso de estos fármacos. Explica que esto tendría que ver con un cambio en nuestra epidemiología. “Antes de la pandemia había un reporte de alrededor de un 30% de síntomas de depresión o ansiosos en las mujeres embarazadas –según estadísticas que hizo el doctor Jadresic–, y a partir de la pandemia lo que se ha visto es que estos números han aumentado un montón, llegando a cifras del orden de 50% e incluso un poco más de síntomas ansiosos o depresivos, en épocas como el posparto. Esto es un estudio del año 2022 de Mateus, por lo que el aumento de la prescripción de estos fármacos va muy en línea con el cambio epidemiologico”, indica.
Natalia Bruna coincide. Explica que, por ejemplo, la depresión posparto es un trastorno preocupantemente frecuente en nuestro país, donde existen tasas conocidas de alrededor del 20%. Aún así, se estima que esos números son aún mayores, considerando que aún son muchos los casos que no se reportan ni diagnostican. En este sentido, dice la profesional, el uso de Sertralina es bastante frecuente porque presenta riesgos muy bajos en relación con la gestación y la lactancia.
La psicóloga dice que si bien no puede señalar si ha habido o no un alza de consumo de Sertralina en particular, lo que sí ve es un alza de mujeres que acuden a consulta por depresión postparto. “Todavía existe muy fuertemente la idea de que el convertirse en madre tiene que ser una etapa feliz, o que atravesar una depresión te convierte en “mala madre”. Me parece que estamos en un período de transición y apertura sobre estos temas, por fin lo conversamos más abiertamente y vamos viendo que la maternidad trae muchos matices emocionales, lo que permite también que quienes experimenten algún trastorno puedan pedir ayuda sin tanto temor”, dice.
Y aunque es importante que las mujeres/madres pidan esta ayuda y se asesoren con profesionales de la salud, también es necesario que estos temas abran una conversación que permita avanzar en mejores políticas públicas que empujen hacia una verdadera conciliación de la maternidad y la crianza con la vida profesional, y al mismo tiempo hacia el diseño de espacios y programas de apoyo a la maternidad.
Seguros en gestación y lactancia
Es frecuente que las mujeres en edad reproductiva o que están tratando de quedar embarazadas, que ya se encuentran embarazadas o que están en etapa de posparto, utilicen medicamentos como la Sertralina. Esto, explica la doctora y docente de la Universidad Los Andes, se explica porque dentro de todas las opciones disponibles en el mercado, este fármaco ha demostrado ser seguro. Señala que ha mostrado consistentemente buena evidencia en el embarazo propiamente tal, y además, ha mostrado ser un fármaco seguro en la lactancia. “Tiene un porcentaje de paso hacia la leche materna muy bajo, del orden del 4%, lo que lo hace una molécula segura. Por eso habitualmente, tanto psiquiatras como médicos especialistas en ginecología y obstetricia, lo preferimos por sobre otros remedios con un efecto parecido”, dice.
Comenta
Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.