¿Cómo te gustaría llamarte si fueras mujer?
Cuando estaba embarazada y existía la posibilidad de que fuera mujer, mi mamá pensó en ponerme Andrea. Como con Gabriel le achuntó, y me cae bien el nombre, me llamaría así. Le creería que era el adecuado.
¿Cómo sería tu personalidad?
No creo que sería tan femenina. Sería más despelotada, desguañangada. De peo, de flatos. Me gustaría reírme de eso.
¿Cómo serías físicamente?
Yo creo que parecida a mi. No tan alta, más bien pachacha. Con tendencia a ser musculosa. Tipo pony, pero durita.
¿Harías deporte?
Sí, mucho. Creo que me habría dedicado a la gimnasia olímpica o al nado sincronizado. En el colegio era bueno para la gimnasia, pero no se desarrollaba mucho en hombres. Si hubiese sido mujer, probablemente habría estado en todos los talleres y me hubiese ido muy bien.
¿Serías pretenciosa?
Sí, pero no sería fashion. No me maquillaría ni me haría la keratina.
¿Y te harías cirugías estéticas?
Si me fui a la mierda con el peso, me haría una lipoescultura, porque eso a veces pasa.
¿Cómo te vestirías?
Yo creo que súper lana. Hay unas chaquetas de mujer que siempre me han encantado que son rojas como rococó, medias hindú, bordadas. Me la pondría con un jeans y una polera simple. De zapatos, usaría zapatillas. Creo que sería bien enérgica entonces necesitaría andar cómoda. Los zapatos de taco me incomodarían demasiado.
¿Usarías joyas?
No, no usaría perlitas. Mi estilo sería más de anillo de coco.
¿En qué trabajarías?
Sería cantante y compositora de R&B, soul o hip hop. Me gustaría la música negra.
¿Y qué buscarías transmitir con tus canciones?
Más que un discurso ideológico, trataría de hablar de situaciones que me parecen contradictorias o que contienen en sí mismas un punto de vista o mensajes implícitos. Me gustaría cantarle al amor, a las cosas simples de la vida. No creo que sería una John Lennon o Víctor Jara, sino más bien una Violeta o una Nina Simone.
¿Tocarías algún instrumento?
Cantaría tan bien y sería tan difícil cantar mis canciones, que tendría que enfocarme solo en eso.
¿Serías de concierto masivo?
Sería heavy, muy internacional.
¿Como qué mujer te gustaría ser?
Tendría la fuerza femenina de la Any Murat, que es una gran cantante y actriz chilena, y me gustaría tener la cabeza de la Alexandra Von Hummel, una actriz a la que admiro mucho.
¿Serías feminista?
No creo. Sería más liberal, no velaría tanto por los géneros. Creo que la fuerza es más poderosa que eso, a pesar de no podemos negar que la historia ha sido injusta y ha oprimido a las mujeres, a lo femenino.
¿Tendrías hijos?
Miles. Creo que nací para eso. Como hombre, si pudiera pedirle a un genio que me cumpliera un deseo, le pediría dar a luz. Me gustaría embarazarme esos nueve meses. Intuyo que tendría una gran vocación de madre.
¿Qué no harías nunca como pareja?
Ser infiel. Es horrible.
¿Tampoco la perdonarías?
Más que la infidelidad no perdonaría el engaño, el que mi pareja tuviese una doble vida. Eso no lo aguantaría ni Gabriel ni Andrea.
¿Y la infidelidad de una noche?
Eso sería conversable. Pero creo que Andrea sería fiel, monógama.
¿Si te fuesen infiel, tomarías revancha?
No, pescaría mis cosas y me iría. Mi revancha sería que se quede sin mí.
¿Qué tratarías de hacer siempre con tu pareja?
La difícil labor de amar. Ser flexible, ser una buena compañera en el camino de la felicidad del otro, tratar de tener las menos expectativas posibles, dejarlo libre.
¿Y qué no harías nunca?
No haría hechizos de amor o esas cosas en que las mujeres tienen más poderes.
¿Qué te daría miedo?
Que me pegaran. Siempre he encontrado muy abismante el tema de la fuerza física entre un hombre y una mujer.
¿Qué tipo de hombre te gustaría?
Hippie, relajado. Abierto de mente, trabajólico y apasionado por lo que hace. Que fuera callado.
¿Qué defecto no podría tener?
Las características hacen horribles a los hombres; la terquedad, la rigidez, la obstinación o el orgullo.
¿Y qué te mataría las pasiones?
Que sea mamón, indeciso, celoso. Todas esas estupideces tan chilenas que creo que tienen la gran mayoría, que los hacen arrancar de la mujer empoderada y segura y los llevan a elegir a la de arito de perlas y más conservadora que entiende bien "su rol de mujer". Eso no lo tolero. No soportaría a un hombre así de inseguro con su rol masculino.