Sí & No: Sebastián Gray
Paula 1249. Sábado 21 de abril de 2018. Especial Madres.
NO veo noticieros, sino que los vigilo. SÍ creo que la TV abierta chilena tocó fondo en su miseria y le ha causado un perjuicio inconmensurable a nuestra nación. NO puedo creer que periodistas transen con el rigor profesional, tal como vemos a diario. SÍ me gustaría dirigir un diario o un canal de televisión, para predicar con el ejemplo. NO creo que serían un fracaso comercial. SÍ me apasiona la arquitectura y, por lo tanto, la ciudad. La arquitectura es una vocación, una forma de mirar, de ser, pensar y vivir. NO es lo único que me apasiona. SÍ me sumerjo con igual intensidad en la escritura, la lectura, la docencia, la música. NO soy adicto al trabajo. SÍ creo en el trabajo con sentido. NO creo que uno deba renunciar a ningún talento. SÍ pinto, dibujo, coso, cocino, canto y bailo. NO hay nada más reconfortante que crear con las manos. NO sé para adónde va Chile. Confundimos progreso con desarrollo económico, error fatal. SÍ reconozco la importancia del desarrollo para progresar, pero me horroriza tanta mezquindad campante. NO me parece que la sociedad chilena sea más moderna o feliz ahora que hace 40 años. SÍ tengo esperanza en la juventud chilena, que conozco de cerca como profesor universitario: más informada, consciente y juiciosa que generaciones anteriores. NO creo que haya un momento más desconcertante en la historia del mundo que este (aunque cada generación habrá dicho lo mismo). SÍ me angustia la evidente decadencia causada por el hombre, visible también en Chile: crisis climática, de basura, escasez de agua, extinción de especies, destrucción del patrimonio paisajístico y cultural. NO temo decir que soy un genuino baby-boomer, nacido en Manhattan en los años 50. Aprendí a caminar en Tompkins Square, epicentro de la vanguardia hipster. Después me trajeron a Chile en barco y llegué a Valparaíso. SÍ soy bilingüe, arraigado desde siempre en dos hemisferios y en dos familias muy distintas, una católica y otra judía, ambas ricas culturalmente, gregarias y amorosas. NO creo en un Dios. SÍ creo en la verdad, en la bondad y en la belleza como atributos naturales del ser humano. NO le temo a la vejez ni a la muerte; SÍ le temo a la agonía. NO quise tener Facebook, nunca me dio confianza. SÍ uso Twitter para informarme e intercambiar ideas ingeniosas con extraños; a veces para gritar en el vacío. NO creo en ir dando explicaciones por la vida. SÍ creo en lo público, en el bien común; es decir, en el ideal democrático y republicano con que me criaron. NO creo que sea demasiado tarde para recuperar ese ideal. SÍ me eduqué en un excelente liceo público, mixto, laico y gratuito, socialmente integrado, el triunfo de la República. NO transo, por lo tanto, con nada menos para nuestro futuro. SÍ me gustaría ser infinitamente rico para convertirme en el mecenas de los artistas rechazados, de los brillantes desconocidos. NO hay tiempo que perder para derribar nuestras fronteras aldeanas, terminar con el oligopolio cultural y asomarnos a la verdadera modernidad universal, tan esquiva en este país de falsas pretensiones. SÍ también me gustaría financiar demandas colectivas en nombre de la ciudadanía en contra de las iniquidades del capitalismo salvaje que reverenciamos en Chile. NO hay paz social posible sin justicia, ni justicia sin verdad. SI no nos hacemos cargo de nuestra historia, no avanzaremos.
Señas:
58 años.
Arquitecto.
Profesor UC.
Director de Iguales y Espacio Público.
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