Poetas chilenas jóvenes que deberías conocer

Poetas chilenas Paula

Feminismo y reflexiones biográficas es parte de lo que une a estas nuevas poetas, en su mayoría menores de 30 años, que trabajan en torno a la memoria, las relaciones, el tiempo y las familias.




Sofía Esther Brito (1994), egresada de derecho, publicó Furias callejeras en 2017, una publicación tipo fanzine con una lógica más íntima y menos pública que Bestialidades (2019), su último libro con ediciones Escafandra. Inspirada en las movilizaciones feministas en las universidades durante 2018, la autora reflexiona en este poemario sobre el lado salvaje de las mujeres.

A mí lo de mujer

se me cuela por la ropa

en cada mate caliente

en cada muestra de amor.

De vieja me dejé crecer los sueños,

y le repito a mis crías que de chicas,

no se queden sin voz. (poema Casa).

Victoria Ramírez Mansilla (1991) publicó su primer libro de poesía Magnolios el año pasado con ediciones Overol, que en los últimos años ha abierto un importante espacio a la poesía chilena incipiente. La autora en 2016 obtuvo el Premio Roberto Bolaño de poesía y en 2017 el Premio Municipal Juegos Literarios Gabriela Mistral. En su libro la autora cruza su memoria íntima con su historia familiar, las mudanzas y su vida en el sur de Chile.

Veo a mi madre martillar con amargura

Un clavo hundido en la madera

Su frente arrugada por el sol (…)

Tu eres el clavo oxidado

y por dentro estás apenas

colgando de la muralla. (extracto poema Clavo)

La poeta Micaela Paredes (1993) tiene dos libros publicados: Nocturnal (2017) y Ceremonias de interior (2019). En su último poemario, publicado por Cerrojo ediciones, la autora constata la diferencia entre revivir y volver a vivir para alejarse de la nostalgia y convertir la memoria personal en una experiencia nueva.

La memoria: una herida

accidente del tiempo.

No relamas la piel

del ayer: ese muerto

solo encierra en su carne

el hedor de la huida. (poema Advertencia)

Viviana Ávila (1987) es profesora de lengua castellana y comunicación en Valparaíso y en 2017 publicó su primer libro La mató por amor (editorial La calabaza del diablo), un ensayo sobre el lenguaje machista que predomina en la sociedad. Y hace unos meses publicó su último libro Nosotras las otras, bajo la misma editorial. Son reflexiones y poemas intituitivos, afectados, muchos de ellos publicados anteriormente en su Instagram a raíz de sentimientos cotidianos

Te transformo en poesía para así definirte mejor, porque el lenguaje mundano no basta para abarcarte, entonces hilo palabras que viven cuando vienes tú a mi cabeza (o a mi pecho) y así puedo imaginarte y hacerte en mí a través de ellas.

Busca en las redes

Instagram también se ha vuelto una plataforma muy relevante para muchas autoras jóvenes que aún no han publicado un libro, pero que han encontrado la forma de mostrar lo que hacen a través de sus publicaciones. Una de ellas es Brígida González (1995), poeta y maquilladora creadora del proyecto ¿Tenís papel? donde se difunden y recitan poemas de escritores incipientes. En su cuenta @amortajada es posible leer algunos de sus escritos. También Cristalina Parra (2000), nieta de Nicanor Parra, publica sus poemas y reflexiones cotidianas en inglés y español en su cuenta @cristalinaparra.

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