Saludable-mente: La propuesta para apoyar la salud mental en Chile durante la pandemia
El domingo 18 de mayo, el Presidente Sebastián Piñera anunció la implementación de Saludable-mente, un programa que tiene por objetivo fortalecer, en los sectores público y privado, los tratamientos de salud mental. Según explicó el Ministro de Salud, Jaime Mañalich, la medida pretende fortalecer la red de apoyo Salud Responde, establecer operativos de atención en los centros de salud familiar de atención primaria y la instalación de una plataforma donde los beneficiarios de Fonasa puedan agendar consultas psicológicas o psiquiátricas de forma gratuita.
El programa nace a partir de la Estrategia Nacional de Salud Mental, elaborada por especialistas de la Universidad de Chile, el cual fue presentado por el rector de dicha institución, Ennio Vivaldi, a la Mesa Social Covid-19, de la que es parte. En el documento, los expertos y expertas hacen un llamado a comprender que “la salud mental es precisamente una de las claves para sobrevivir a esta pandemia y todo lo que conlleva al corto, mediano y largo plazo, desde la crisis potencial en la provisión de servicios de salud hasta ayudar a preservar y reconstruir una sociedad post-pandémica”.
Pese a que han pasado varios días desde este anuncio, aún no existen detalles sobre cómo se va a implementar, pero durante la jornada del martes 26 de mayo se convocará a una mesa de trabajo, desde donde deberían surgir estos detalles.
¿Por qué es necesario un plan de salud mental?
“Abordar la salud mental en estos momentos es importante no solo porque el contexto actual afecta nuestra salud mental, sino que también porque ésta juega un rol clave para superar la pandemia”, explica el rector de la Universidad de Chile, Ennio Vivaldi, quien añade: “Desde antes de la emergencia sanitaria veíamos que era muy difícil abordar el tema de salud mental, y precisamente Chile es un país que presenta alarmantes indicadores de depresión en las mujeres de niveles socioeconómicos más bajos y en adolescentes”.
Según explica el académico “se presentan altos indicadores de abuso de alcohol y sustancias, entre otros aspectos, a los que se suma la desigualdad social, la desconfianza en las instituciones, el desacoplamiento entre la institucionalidad y la sociedad civil, y el malestar subjetivo de la ciudadanía, por lo que debemos enfrentar esta situación de manera colectiva”.
“Es fundamental tener una estrategia para abordar los problemas de salud mental en estos momentos, no hay que esperar que haya peores consecuencias”, explica Vania Martínez, psiquiatra infantil y adolescente, académica de Universidad de Chile, directora de Núcleo Milenio Imhay y miembro del equipo redactor de la estrategia nacional en Salud Mental para la pandemia por Covid-19 presentada por Vivaldi.
Martínez asegura que es en momentos como el actual cuando hay que tomar las acciones que promuevan una buena salud mental y así prevenir problemas futuros y abordar y tratar adecuadamente a las personas que en estos momentos están con problemas de salud mental.
¿Cuál es la propuesta?
Pese a que durante la jornada del martes se deberían resolver detalles de cómo funcionará el programa Saludable-mente, desde la Universidad de Chile entregan detalles sobre la propuesta que fue aceptada y sobre la cuál se van a basar las medidas.
Se trata de una estrategia integrada y universal, con enfoques de derechos de género, de curso de vida, de inclusión de equidad, lo cual se lograría a través de una coordinación de actores a nivel nacional, regional y territorial, con la participación de las comunidades, con la coordinación de actores como ministerios, municipalidades, academia y la sociedad civil, e incorporando una perspectiva integral donde no prevalezcan los factores económicos por sobre los humanos y sociales.
Está enfocado en toda la población, con estrategias específicas para equipos de salud que trabajen con personas contagiadas, personas contagiadas y sobrevivientes, familiares de personas contagiadas y fallecidas, personas con trastornos psiquiátricos o problemas de consumo de alcohol y otras sustancias, personas mayores y, finalmente, niños, niñas y adolescentes.
La propuesta busca adoptar la pirámide de intervención en Salud Mental y Apoyo Psicosocial difundida por la Inter-Agency Standing Committee, que incluye consideraciones sociales en servicios básicos y seguridad, refuerzo de apoyo comunitario y familiar, y servicios de atención no especializada y especializada.
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