Sexo después del embarazo
Las inquietudes que surgen en torno a la sexualidad suelen ser infinitas, sin embargo, muchas veces son omitidas por miedo a que se traten de una excepción. En Paula quisimos conversar sobre estos temas abiertamente y darles un espacio a ustedes, nuestras lectoras, para que puedan plantear sus dudas y los expertos ayuden a resolverlas.
PREGUNTA
"Mi último parto fue natural. Todo estuvo normal, salvo porque me hicieron una episiotomía que me dejó una cicatriz muy dolorosa por un par de semanas. Eso hizo que pasada mi cuarentena sintiera mucho temor por retomar mi vida sexual. Primero era miedo porque no sabía si había cicatrizado correctamente, pero también me aterraba volver a sentir dolor. No es que me muriera de ganas de tener sexo, buena parte del tiempo quería descansar y concentrarme en mi guagua, pero cuando con mi pareja quisimos intentarlo, estaba llena de dudas. Por eso me gustaría saber cuándo una mujer está preparada para retomar la vida sexual después del parto.
Loreto, 35 años, profesora.
RESPUESTA
La episiotomía -incisión que se practica en el periné de la mujer, partiendo de la comisura posterior de la vulva hacia el ano, con el fin de evitar un desgarro de los tejidos durante el parto- es un procedimiento que se hace cada vez con menos frecuencia. El ginecólogo Luis de la Torre de Clínica Ciudad del Mar explica que antiguamente alcanzaba el 90 a 95% de los partos, sin embargo, actualmente no debiera representar más del 10 o el 20%. La razón es que "su aplicación, además de ser innecesaria en la mayoría de los casos, puede generar algunas cicatrices y retracciones en la zona perineal, las que a su vez podrían producir dolor y molestias en el periodo posparto y al momento de retomar la actividad sexual".
En aquellas pacientes en que es muy necesario hacerla, la recomendación del experto es que a partir de 10 a 14 días posparto, la mujer realice ejercicios de masaje perineal con aceites que pueden ser minerales u orgánicos para contribuir a que la cicatriz sea delgada y no genere estas consecuencias. "Una buena forma de prevenir la episiotomía es realizar una preparación perineal durante el embarazo y previo al parto, la cual habitualmente están a cargo de kinesiólogas expertas en piso pélvico", agrega.
Pero más allá de esa cicatriz puntual, la mujer en el periodo del embarazo y en el periparto experimenta una serie de cambios físicos, biológicos y emocionales. Por tanto lo primero que hay que establecer es que durante esta etapa debe estar muy atenta a cómo ella está evolucionando y a su auto cuidado. "Medicamente hablando, el reinicio de la actividad sexual puede ser tan precoz como la primera o segunda semana posparto en aquellas mujeres que tuvieron un parto normal, sin episiotomía ni lesiones en el canal vaginal. También puede ser tan tardío como seis a ocho semanas posparto en aquellas pacientes que sí presentaron esas complicaciones. Es más, aquellas pacientes que vivencian un parto traumático y doloroso, que haya sido instrumentalizado o en el que haya sufrido violencia obstétrica, podrían tener serias dificultades para reiniciar su actividad sexual. En esos casos es mejor que se apoyen con expertos", comenta el ginecólogo Luis de la Torre.
La kinesióloga experta en sexualidad, Odette Freundlich, agrega que "desde el punto de vista hormonal, el rápido descenso del estrógeno y el aumento de la prolactina pueden generar sequedad vaginal y esto ocasionar dolor durante la actividad sexual. Al mismo tiempo, estos cambios hormonales pueden disminuir el deseo sexual o libido. Desde el punto de vista psicoafectivo, el nacimiento de un hijo es una situación que suele generar estrés emocional, lo que sumado al inicio de la lactancia y los desafíos que implica terminan haciendo del periodo posparto un momento en el que las ganas de retomar la actividad sexual, en muchos casos, pasan a ser algo secundario".
En este sentido, dice el ginecólogo, es importante que las parejas conozcan y comprendan que el reinicio de la actividad sexual es una situación que debe idealmente ocurrir cuando la mujer se encuentre en buenas condiciones físicas, psíquicas y afectivas. "Nunca hay que presionarlas, ya que se debieran generar los espacios necesarios para que la mujer se sienta cómoda y motivada con esta situación". El rango normal para que esto ocurra es entre la tercera y octava semana posparto. "Si transcurridas 12 semanas posparto la mujer aun siente dolor, es mejor que consulte a un especialista para que evalúe si se ha producido alguna cicatriz o algún traumatismo posparto que esté generando ese problema", concluye de la Torre.
Algunos consejos
Odette Freundlich dice que lo principal es darle tiempo a la mujer para que se recuperen sus tejidos. "Pero si una mujer, pasado el tiempo de cicatrización, siente muchos deseos de retomar su actividad sexual, una buena idea es intentar posiciones sexuales como ella arriba del hombre o ambos de lado, ya que éstas le permiten manejar la profundidad de la penetración".
También recomienda después de un mes del parto empezar con ejercicios de activación de la musculatura perineal o de la vagina. "Se parte primero contrayendo durante tres segundos y relajando seis. Se repite tres veces al día. Y con el paso de las semanas se aumentan los segundos. A la segunda semana, deberías estar contrayendo cinco segundos y descansando diez. Así sucesivamente hasta que sientan que la musculatura ya no está débil".
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