Tras los nuevos pianistas de Chile

Paula 1161. Sábado 22 de noviembre de 2014.

Que niños y jóvenes virtuosos del piano sigan una verdadera carrera profesional. Eso busca el concurso Toca el Cielo de radio Beethoven, cuya segunda versión acaba de concluir. "Queremos más pianistas profesionales en Chile", dice el premiado músico nacional y presidente del jurado del concurso, Luis Alberto Latorre. Aquí, analiza la escena.

Solista de la Orquesta Sinfónica de Chile desde 1990 y considerado uno de los mejores pianistas del país, Luis Alberto Latorre (54) se convirtió en músico en los 70, cuando solo había tres escuelas donde estudiar. "Hoy hay muchas personas tocando piano, y eso es muy bueno, han aparecido muchas universidades y profesores, pero pocos llegan a titularse", dice.

Precisamente para incentivar la profesionalización de pianistas jóvenes, Adolfo Flores, director de radio Beethoven, le encargó a Luis Alberto Latorre la misión de desarrollar Toca el Cielo, un certamen de piano para niños y jóvenes que les entrega una vitrina única, al transmitir las canciones tocadas por ellos en la radio Beethoven y contar con el feedback de los auditores. "La idea es estimular a que los niños salgan de las cuatro paredes, toquen y se entusiasmen a seguir una verdadera carrera como pianistas. La meta es que esta competencia llegue a ser internacional. Pero falta más estudio, más conciencia, todos están muy encerrados: tienen que salir a tocar", dice Luis Alberto Latorre, quien presidió el jurado del concurso compuesto también por Edith Fischer, Paulina Zamora, Mario Alarcón y Felipe Browne, todos con un reconocido currículum como concertistas y formadores de pianistas.

De los 50 niños y jóvenes que concursaron, solo 14 pianistas entre 10 y 16 años participaron en la final que se realizó hace un mes en el Centro de las Artes 660 de CorpArtes, donde interpretaron a reconocidos compositores como Chopin, Bach y Schuman, además de otras obras inéditas escritas para la ocasión por el compositor chileno Miguel Farías.

La ganadora indiscutida fue Catalina Arteaga (11), una niña de Valdivia que estudia piano desde los seis años en el Conservatorio de Música de la Universidad Austral de Chile, con su maestra Ximena Cabellos –la misma que formó a la reconocida pianista chilena Mahani Teave (31)–. "Ella es muy buena, tiene condiciones, buena ejecución y excelentes profesores, que es trascendental en esto. Un buen profesor con un niño estudioso, como Catalina, de seguro puede dar como resultado un gran pianista en el futuro", concluye Latorre.