Este mes abrirá con Mercurio retrógrado, un tránsito que ocurre entre tres y cuatro veces al año. Cuando este planeta sobrepasa nuestra órbita alrededor del Sol (porque se mueve mucho más rápido), los antiguos astrónomos veían en el cielo cómo su movimiento producía una especie de zeta, como si estuviese regresando. Es por esto que para la astronomía Mercurio retrógrado sigue siendo un fenómeno visual, no real.

No obstante, los astrólogos seguimos leyendo la retrogradación de los planetas como procesos de reevaluación, de reconsideración del pasado y de entendimiento del presente desde ahí. La concepción del tiempo para la astrología se basa en los ciclos y las vueltas de la espiral, por lo que la energía que vuelve a ocurrir, nos vuelve a mostrar algo del pasado, no revivir el mismo.

Mercurio retrógrado en Aries estará presente casi todo el mes de abril, lo que nos indicará que este repaso es a través de la energía de quiénes somos, qué queremos hacer y por qué. Aries es el primer signo del zodíaco, fiero, audaz e independiente, que busca desde la verdad de su voluntad mostrar su propia identidad.

Esta energía en su baja nota nos puede hacer propensos a perder el tino en las situaciones, a no tener tacto para poder decir las cosas, a abrir verdades dolorosas y por sobre todo expresarnos desde la visceralidad. Mercurio en Aries es una posición sumamente franca, por lo que en retrogradación puede instar a las confusiones, discusiones y peleas.

Mercurio en Aries se hará presente también en el eclipse de Sol que tendremos el día 8 de abril. Este eclipse será una apertura total a la energía de Aries y Libra como eje, que venimos experimentando a migajas desde julio del año pasado. Este eje nos llama a trabajar el equilibrio y armonía entre los demás, versus el equilibrio y la armonía internas del reconocimiento de quiénes somos y qué queremos.

Esta temporada de eclipses nos llama a soltar viejas concepciones respecto a los vínculos, la justicia y el equilibrio, por lo que nos instará de una forma visceral a hacer aparecer quiénes somos y qué queremos.

Nuevos horizontes y caminos serán abiertos, así como otros podrán ser abruptamente cerrados. La baja octava de Aries es la violencia desmedida, lo que puede causar conflictos políticos, cambios de límites territoriales y especialmente guerras.

Este eclipse de Sol en Aries, junto con Mercurio retrógrado, auguran un comienzo pujante de una nueva realidad. Será posible visibilizar una profunda sanación de qué concebimos ahora, sin la opinión tan profunda de los demás encima. También es una gran etapa para soltar finalmente todos los vínculos que no nos honran en quiénes somos ni qué queremos.

Abrirnos camino a la novedad implicará asentarlo en la realidad, por lo que el día 24 de abril tendremos una conjunción planetaria que solo ocurre cada doce años: Júpiter y Urano en Tauro. Esta energía nos llevará a la materialización del cambio que nos antecede este gran eclipse.

Podremos ver creadas nuevas instituciones, solidificados nuevos acuerdos y nuevas alianzas, honrando y respetando quiénes somos ahora, luego de tanto cambio, tanta crisis y tanto cierre. Es posible también que temáticas relacionadas a la economía mundial y la geopolítica tengan una injerencia directa en nuestra construcción individual de las cosas.

Para ver dónde caerán Mercurio retrógrado y el eclipse en tu carta astral, debes sacar tu carta en astro.com ó carta-natal.es, con tu fecha, hora y lugar de nacimiento. Donde encuentres el signo de Aries, corresponderá a una casa o un planeta, lo que nos entregará información sobre qué área de tu vida será activada con esta energía.

Es tiempo de abrirse a lo nuevo, aunque nos dé miedo, rabia o sensación de descontrol. Saltar al vacío nos mostrará lo lindo que hay del otro lado, en la otra orilla. Atrévete.