Big Barrio Recreo: la transformación digital que llega a un barrio de Viña del Mar

El concepto de “ciudad inteligente” es uno muy grande. Construir un entorno de este tipo implica levantar un sitio urbano en el que la tecnología y la constante innovación se integren para así mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. Son cientos de sensores, redes de datos y software que, en conjunto, pueden velar de forma eficiente por la gestión de recursos, como el transporte y la energía, así como por la seguridad y los datos.

Caminar por las calles con semáforos que se ajusten en tiempo real al flujo del tráfico, disminuyendo así la posibilidad de tacos o contaminación; un alumbrado público que solo se accione al captar movimiento, o servicios de emergencia que lleguen más rápido gracias a sistemas de navegación inteligente. Todos son elementos que podrían ser parte de una smart city y en los que ya trabajan algunos conos urbanos alrededor de Chile y el mundo.

Big Barrio Recreo, en Viña del Mar, es un proyecto que se inició en 2016 y que encabeza el Campus Creativo de la Universidad Andrés Bello (UNAB), de la mano de la municipalidad de la ciudad.

El concepto en sí, dice Hugo Rojas, uno de los líderes de la iniciativa, responde a un Barrio Inteligente Gestionado (BIG) y “es algo que siempre hemos querido ver como una acreditación o sello que los barrios y ciudades puedan ir incorporando”.

“En estos últimos años, la tecnología ha avanzado muy rápido y evolucionado hacia un enfoque más territorial y, después de eso, más centrado en las personas”, dice el académico, director del LabU de la institución. Viña del Mar tiene “mucha identidad y es una ciudad pacífica, con un programa más abierto”.

Fue particularmente durante el periodo tras el estallido social y la pandemia del Covid-19 que “nos dimos cuenta de que, para seguir avanzando en este camino, considerando aspectos económicos y políticos, buscamos una zona más escalable. Un barrio, por supuesto a la escala de lo que representa, es donde está el ADN de la ciudad”, plantea Rojas sobre la decisión de optar por la zona de Recreo, que es un sector histórico, considerado fundacional en la ciudad y que representa a distintas capas o estratos económicos y sociales, siendo además una zona bisagra con Valparaíso.

En sí, la iniciativa contempla la instalación, en su etapa piloto, de tótem inteligentes en los que los usuarios podrán realizar diversas actividades. Eso sí, el levantamiento contó de diversas fases. Primero, estuvo periodo de “Inmersión”, en que se produjo un acercamiento entre las partes junto a los vecinos.

Luego, siguió la “Plaza Digital”, en la que los beneficiados fueron capacitados e introducidos en las nuevas tecnologías que se sumarían al entorno. El tercer punto, que se llamó “Metavisión”, obtuvo una visión estratégica, junto al municipio y con las tecnologías de participación ciudadana y a lo largo de cinco meses, que tuvo como resultado la visión de transformación digital que querían los vecinos para su barrio.

Esos tres puntos, dice Rojas, posicionaron lo que están haciendo ahora y se fijaron cuatro pilares. El primer interés de los participantes fue asociatividad, seguido de seguridad, economía local y patrimonio.

“Esos cuatro ejes, constituyeron los requerimientos de la ‘Co-ciudad’ y armamos una Mesa Técnica de la comunidad que armó el Municipio”, comenta. Como LabU, que trabaja la temática de ciudades inteligentes, integraron a Microsoft y a Claro como partners tecnológicos. Eso sí, asegura, la empresa TELCO no solo se quedó en eso, sino que también abordó la tecnología Cloud e IOT. Microsoft tomará un rol más activo en la siguiente etapa, porque se va a trabajar con más fuerza la inclusión de Inteligencia Artificial.

Carlos del Fierro, presidente de la Junta de Vecinos Villa Moderna Recreo y representante de las juntas de vecinos en la Mesa Técnica, dice que el potencial que tiene la zona es la cantidad. Solo en Villa Moderna son unos tres mil vecinos, de los catorce mil que componen Recreo.

“Casi un 30% es adulto mayor y les cuesta tener información, entonces, gracias a esto van a poder actuar a través de su teléfono y conectarse con lo que los rodea”, dice el representante. “Tendrán alarmas de seguridad en caso de asalto y otro montón de condiciones que permitirán que el vecino sienta que está conectado directamente con seguridad ciudadana del municipio y una pantalla con un funcionado encargado de recibir cualquier denuncia”, dice.

Además, Del Fierro dice que han tenido reuniones en las que participaron los vecinos, en las que se les iba explicando, haciendo presentaciones y “fue todo un proceso en el que todos tuvimos que participar y ahora solamente nos queda poder utilizar estos sistemas”.

El representante de las juntas de vecinos dice que el tótem están instalados hace poco más de dos meses, para que todos los vecinos que pasen puedan intervenir, presentar sus inquietudes y usarlos.

“Pero esta es la base, para después hacer postaciones en ciertos sectores del barrio, para que el vecino no esté sujeto a tener que ir a la calle a ver algo, sino que lo va a tener a la mano: ¿Quiere saber si la panadería está abierta o si tiene el producto que busco? Ahí va a estar”, plantea.

Paulina Sovino, representante del comercio en la Mesa Técnica de Big Barrio, dice que la seguridad es el principal eje de preocupación para su sector. “Es justamente el motivo por el que comenzó la agrupación de comerciantes, porque nos unimos para ayudarnos en ese tema, porque han aumentado los robos y asaltos, y se entiende que son de ocasión y no son personas del sector”, comenta la comerciante. Los sensores y cámaras inteligentes serían una contribución para así prevenir incidentes de este tipo, pero también asegurar que el flujo hacia el sector continúe.

“Ojalá resulte, para que la gente se entusiasme y participe, para que se puedan ir incorporando más áreas”, dice la representante. El tótem está actualmente instalado en el sector de Calle Condell con Diego Portales y se mantendrá un par de meses. “Si la gente participa, poder así incluir más sistemas, porque nos han hablado de basureros inteligentes, cámaras y alumbrado: esto es solo el inicio”, comenta Sovino.

El sistema invita a los vecinos a participar de una aplicación, da información del comercio, horarios, horarios de locomoción y de retiro de basura. “Lo otro son cosas que se van a ir desarrollando, pero lo haremos en la medida que la ciudadanía participe de esta iniciativa”, adelanta.

Macarena Ripamonti, alcaldesa de la Ciudad Jardín, dice que la colaboración entre las distintas entidades, el sector público y privado, ha sido clave en este proceso. Debido al esfuerzo conjunto, la ciudad puede así no solo avanzar en términos tecnológicos, sino también en su seguridad, asociatividad, desarrollo económico y turístico. Así, Recreo y su historia se transforma en un escenario ideal para impulsar una iniciativa de este tipo.

“Es importante destacar que este es un proyecto piloto, pionero en el país con estas características, porque es un hito innovador significativo, que marca un paso crucial para la ciudad que aspiramos construir”, plantea la edil. La infraestructura inteligente, dice, no solo representa un avance tecnológico, sino también la misión que tiene la municipalidad con el desarrollo integral de la ciudad.

La Municipalidad se unió a principios de 2020 al proyecto y, desde entonces, han participado junto a ellos en las distintas etapas de trabajo. Cada una de estas etapas, mencionadas por Hugo Rojas, han tenido como objetivo capacitar a la comunidad en la transformación digital y garantizar su involucramiento activo. “Desde el lanzamiento de la mesa técnica hace menos de un año, avanzamos rápidamente para convertir esta visión en una realidad tangible”, comenta la alcaldesa a “Piensa Digital”.

Este tótem inteligente es solo el primero de muchos y marca el comienzo, augura Ripamonti, de una transformación mayor que están impulsando. “Vemos un gran potencial para este tipo de iniciativas, porque la tecnología no solo mejora nuestra calidad de vida diaria, sino que también fortalece el tejido social y económico de la comunidad”, añade.