Contra viento y marea: los diez años de un restaurante emblema de Chiloé

Durante el período más duro de la crisis sanitaria, el Mercadito de Chiloé, restaurante que la diseñadora santiaguina Mariane Künsemüller abrió en 2012, debió cerrar sus puertas. Ella, por su parte, debió comenzar con un delivery de pastas frescas para poder sacar a flote al Mercadito.

Hoy saca cuentas alegres: logró mantener en pie a su emprendimiento, parte de una oleada de locales gastronómicos que llegó a comienzos de la década pasada a dar una nueva cara a la gastronomía local, junto a otros buenos restaurantes como Travesía o Rucalaf.

De las ventajas de emprender en la isla, de las dificultades que ha atravesado en el camino y de lo que se viene para el Mercadito conversó esta emprendedora en ZOOM País, la conexión con regiones de Transformadores, el webshow; un espacio que también tuvo como invitado a Nicolás Bové, director ejecutivo de Emprende Tu Mente, organización que ha organizado para los días 5 y 6 de octubre un gran encuentro de emprendedores en Concepción.