La idea surgió del modo en que suelen aparecer las ideas: en una conversación entre dos amigos. El publicista David Allende y el ingeniero comercial Ignacio Hinojosa estaban hablando de sus respectivos padres, que estaban en una edad próxima a la jubilación y no sabían qué iban a hacer a futuro: el padre de Hinojosa es diplomático y obligatoriamente debía jubilar, a su pesar, mientras el de Allende había pasado la barrera de los 50 años y le estaba costando mucho tener estabilidad laboral. El tema de los adultos mayores quedó instalado en ambos.

La idea devino en un negocio y cuatro años después, la pequeña empresa tiene 10 trabajadores y se llama ServiSenior: un portal donde se publican avisos de trabajo para mayores de 50 años y, a su vez, personas de la tercera edad publican avisos buscando trabajar. Una idea de plataforma hasta ahora única en Chile, que tiene contexto conocido: las mujeres jubilan a los 60 años, los hombres a los 65, mientras la expectativa de vida es de 79 años y es, según la Organización Mundial de la Salud, el país con mayor expectativa de vida de Latinoamérica y, además, las pensiones se ha vuelto un tema social relevante, por sus bajos montos.

“Mi papá tenía que jubilar y él quería seguir, no por un tema económico, sino porque le entró un pánico sobre qué iba a hacer después de los 65. En un diplomático lo que importa es la experiencia y es muy ilógico tener que irte para tu casa solo por llegar a una edad determinada”, dice Ignacio Hinojosa. “Hicimos una lluvia de ideas y se nos ocurrió implementar un modelo de economía colaborativa, y a través de una plataforma conectar posibilidades para la tercera edad. Era ir a necesidades concretas”, añade sobre los primeros pasos del negocio, que echaron a andar luego de reunirse con adultos mayores para detectar necesidades y conocer a su público objetivo.

El otro paso que dieron fue detectar especialmente a un segmento de 30 a 40 años, con poco tiempo para hacer una serie de tareas diarias y que podían delegar eso en otras personas.  Hinojosa dice que fue algo lento, que tuvieron una primera versión del sitio que nunca vio la luz y que tuvieron que ir a hablar con algunas empresas para que confiaran en lo que estaban ofreciendo en la plataforma web. Además, los adultos mayores no están tan familiarizados con la computación, y la página pedía también un mail, por lo que hicieron un trabajo de difusión que considerara esas barreras y, en algunos casos, que fueran los hijos o sobrinos de las personas mayores quienes los ayudaran.

ServiSenior cobra una comisión por el valor del servicio –al estilo Uber o Airbnb- y también trabajan con muchas empresas a las que se les ofrece una plataforma personalizada.

¿Qué trabajos se pueden encontrar en la página? Uno de los más requeridos es el servicio de acompañamiento de personas. También el hacer trámites habituales como la revisión técnica del auto; servicios hogar (cocina, planchado, limpieza); y un sistema de reemplazo de profesores para colegios.

En cuatro años, han generado trabajo para 500 personas, que a su vez han ganado 315 millones de pesos, dice Ignacio Hinojosa. “Lo que hicimos fue analizar todo lo positivo de las personas mayores: el servicio que ellos dan es relevante, porque lo asumen con una filosofía de trabajo muy distinto a las generaciones más jóvenes. Siempre buscan resolver los problemas, quieren dar todo de sí, les importa hacerlo bien”, describe Hinojosa.

Parte importante del éxito de ServiSenior está en los cuidados que hacen para la inscripción de las personas que buscan trabajo. Además de pedirles un mail, deben llenar un formulario y enviar algunos documentos que validen su condición en todo ámbito. Finalmente, realizan un test social en línea, que da visto (o no) el visto bueno para prestar servicios y considerar una entrevista presencial, que a veces es única o grupal.

Municipalidades, cajas de compensación y empresas son algunos clientes que enumera Ignacio Hinojosa como habituales. Y él, que al igual que su socio dedican tiempo completo al negocio, dice que el emprendimiento le ha dado doble satisfacción: porque se convirtió en su empresa y porque ha venido a ayudar a un sector de la población que cada año crece, al igual que sus necesidades, y que es poco considerado para la mayoría de los puestos laborales.