Empresas comienzan a utilizar WhatsApp para ofrecer trabajo

Patricia Rojas (40) trabaja en una empresa de alimentos, donde hace tortas y pasteles que se venden a grandes supermercados. Reconoce que está abierta a trabajar en lo que salga, aunque lo ideal para ella es que sea en procesos productivos. Acostumbraba a buscar trabajo por Facebook o en portales de empleo. No era lo ideal, porque no le gustaba tener que crear una sesión distinta en cada portal. Incluso, en uno de ellos olvidó la contraseña y no pudo volver a entrar. Pero su actual puesto no lo encontró en ellos, sino que se lo ofrecieron por WhatsApp.

Rojas acostumbraba a revisar distintos grupos de Facebook, por si encontraba alguna oferta de trabajo que se acomodara a lo que sabe hacer. En uno de ellos, tras comentar una publicación que llamó su atención, le respondieron que mandara un mensaje por WhatsApp para más información. Ella lo hizo y le respondió una reclutadora de SOS Group, quien le preguntó si la podía incluir en un grupo y Rojas aceptó. Hace un año entró por primera vez a uno de estos grupos y, desde entonces, por esa vía ha encontrado trabajo seis veces.

A las ofertas de trabajo publicadas en portales de empleo, Facebook y LinkedIn, se suma WhatsApp, donde empresas de recursos humanos crean grupos para publicar sus ofertas laborales. Álvaro Vargas, gerente general de SOS Group, empresa de recursos humanos que tiene una decena de estos grupos, explica que para el reclutamiento es clave acercarse lo más posible a distintos grupos objetivos. WhatsApp es la aplicación de comunicación más popular en Chile, según una investigación hecha por Accenture.

Como su uso está bastante difundido, WhatsApp, que permite crear grupos de hasta 256 miembros, se posiciona como una buena herramienta para encontrar trabajadores, especialmente si se dedican a procesos continuos. “Involucras a gente que te pueda servir en algún minuto y que tiene disponibilidad. El concepto es mantener una masa viva de gente que pueda servir para un tipo de cargo”, dice Vargas. WhatsApp se ha convertido en la técnica que más usan en SOS Group para reclutar a aproximadamente 500 personas al mes.

Cuando las empresas con las que SOS Group trabaja solicitan un número de personas especializadas en  ciertas áreas, ellos ya tienen a esas personas dentro de un grupo, en el que publican la oferta y los datos correspondientes a ella. “La dinámica es que tú ya tienes a la gente, la gente responde muy rápido y es muy fácil dar las instrucciones. La comunicación es muy expedita y rápida, te ahorra un montón de tiempo”, explica Vargas.

Lissette Domínguez, psicóloga laboral y directora de reclutamiento y selección de SOS Group, cuenta que dar este nuevo uso a WhatsApp se les ocurrió hace un año y medio, porque debían reclutar ingresos masivos para cargos logísticos, como operarios de bodega y de producción, reponedores y promotores. “Si se confirma de uno a uno, es lento. Con un grupo de WhatsApp es más rápido confirmar asistencia para el día del ingreso”, dice.

Además de la velocidad que permite WhatsApp, Domínguez también notó que en muchos casos, cuando los trabajadores terminaban sus proyectos, inmediatamente preguntaban por nuevas ofertas de trabajo, por lo que era necesario seguir en contacto y un grupo de WhatsApp era la mejor forma de lograrlo.

El proceso no solo es más rápido para los reclutadores, sino que también para quienes están en búsqueda de empleo. "La respuesta es al tiro, no tengo que esperar a que lean mi curriculum, porque ya he trabajado con ellos. Le he dado el dato a personas nuevas y siempre les responden, les mandan audios o las llaman y les explican", dice Patricia Rojas.

Para formar grupos en WhatsApp, en SOS Group parten con un proceso de difusión de ofertas laborales en plataformas tradicionales, tanto portales de empleo como redes sociales. En estos sitios invitan a personas a través de un número de teléfono a incorporarse. Crean distintos grupos, según las especialidades de las personas y los lugares en que podrían trabajar.

Les ha pasado que cuando ya tienen un grupo armado, los mismos miembros solicitan que acepten a nuevas personas, que también están en búsqueda de trabajo. Esto permite que crezcan gracias a sus propios miembros. “Tenía una amiga sin trabajo. La administradora me pidió que mandara su curriculum y ellos la contactaron y la agregaron a un grupo de call center, que era lo que ella quería”, recuerda Rojas.

En las historias de los grupos se publican, cada día, ofertas laborales que habitualmente requieren una rápida convocatoria. De esta forma, los interesados responden en el mismo día. Incluso, han podido publicar ofertas laborales en una tarde para empezar a trabajar al día siguiente, porque los integrantes del grupo pueden responder de forma inmediata si les interesa y tienen disponibilidad.

“Hay gente que tiene su base de datos en Excel, nosotros las tenemos en WhatsApp. Todo lo hemos traspasado al teléfono y la ordenamos en grupos”, afirma Domínguez. Ella sostiene que los grupos logran ahorrar un estimado de 40% de tiempo. Si una llamada a una persona toma entre dos y tres minutos, enviar un mensaje toma segundos, y lo hacen de forma simultánea a una gran cantidad de personas.

Patricia Rojas admite que a ella no le gustan mucho los grupos de WhatsApp, pero considera que los que se usan para buscar trabajo han sido bien ordenados. No tiene otros fines además de buscar trabajo. En los grupos es clave respetar el objetivo, por lo que no publican productos en venta, videos o fotos personales. También se ha puesto en práctica la política de escribir solo durante el horario laboral, salvo situaciones excepcionales.