Aun antes de los anuncios formales sobre su gabinete y equipo de trabajo, las señales del presidente electo Gabriel Boric son leídas al detalle y generan reacciones. Pero la atención y las expectativas sobre la nueva administración también vienen desde el extranjero. En un panorama regional que vive su propia reconfiguración y crisis de identidad, las posiciones que adopte el Chile liderado por Boric adquieren mayor relevancia.

Frente a esto, la decisión de no aceptar la invitación del presidente Sebastián Piñera para viajar a Colombia para participar en las cumbres del Prosur y de la Alianza del Pacífico, el 26 y 27 de enero, no fue un asunto trivial. Y no ha sido la única señal entregada por el presidente electo. Hace una semana, Boric se reunió con la directora de Fronteras y Límites de la Cancillería, Ximena Fuentes, según dijo para interiorizarse sobre los asuntos pendientes en ese frente. Ellos son la disputa con Bolivia por las aguas del río Silala y las controversias con Argentina por Campos de Hielo Sur y por la Plataforma Continental. Al terminar la reunión, Boric dijo que “quería dar garantías” de que en estas materias mantendría “una política de estado y de continuidad”.

Sobre los desafíos en el frente internacional de la nueva administración conversamos con la abogada Paz Zárate, quien tiene una particular formación y experiencia al respecto.